Europa se desmarca de Trump y avanza en su acercamiento a Cuba
Una comisión del Parlamento Europeo aprobó un acuerdo de diálogo político y cooperación con la isla.
La Unión Europea sigue su política de acercamiento a Cuba a pesar de la marcha atrás de Washington después de que el presidente Donald Trump anunciara que pone fin a algunas me- didas liberalizadoras aprobadas por la Administración del ex presidente Barack Obama.
La Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo aprobó ayer por abrumadora mayoría (57 votos a favor, 9 en contra y 2 abstenciones) el Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación entre la UE y Cuba y pidió el fin del embargo estadounidense. Los eurodiputados esperan que “el acuerdo sirva para mejorar las condiciones de vida y derechos sociales de los ciudadanos cubanos”.
Este pacto pone fin a la “posición común”, la política europea aprobada en 1996 a instancias del gobierno español (entonces presidido por el conservador José María Aznar, firme aliado de George W. Bush) que congeló la relación cubano-europea y condicionó cualquier mejora a la democratización de la isla caribeña.
El acuerdo aprobado ayer (que ya sólo necesita el voto del plenario de la Eurocámara, a finales de julio, para entrar en vigor) incluye aspectos de mejora de la relación comercial, diálogo político, cooperación económica y derechos humanos, un asunto que el gobierno de Raúl Castro aceptó discutir con los europeos. La Habana era la única capital de América Latina que no mantenía hasta ahora relaciones normalizadas con la UE.
La resolución advierte al régimen cubano que debe mejorar la situación de los derechos humanos de acuerdo con los estándares internacionales y tratados de los que Cuba es signataria e incluye una cláusula a ese respecto para suspender el acuerdo “en caso de vulnerarse las disposiciones sobre derechos humanos”.
El texto asegura que “la persecución y reclusión de cualquiera por sus ideas o su actividad pacífica supone una infracción de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de Naciones Unidas” y pide “la liberación de toda persona encarcelada por esos motivos”. Los eurodiputados aprobaron una resolución adjunta específica sobre derechos humanos.
También habrá encuentros ministeriales regulares entre Cuba y la UE y se aumentará la ayuda financiera europea a Cuba en el marco de la política de cooperación europea. El acuerdo fue firmado por el canciller cubano Bruno Rodríguez y la jefa de la diplomacia europea Federica Mogherini en diciembre del año pasado y sólo espera la ratificación parlamentaria para entrar en vigor.
El compromiso aprobado ayer por los eurodiputados supone un punto de inflexión en las relaciones entre Cuba y el bloque europeo que acaba con más de dos décadas de encontronazos. La Eurocámara “reclama el cese del bloqueo económico estadounidense sobre la isla y destaca el gran impacto que tiene sobre la población cubana”.
“Ahora que Trump quiere volver a aislar a Cuba, es necesario que la UE aproveche esta oportunidad para estar más cerca de la isla”, dijo la ponente parlamentaria del acuerdo, la eurodiputada española Elena Valenciano, al término de su votación por la comisión de Asuntos Exteriores. “Con esta votación, el Parlamento Europeo apuesta por el diálogo y la cooperación con Cuba como el mejor instrumento para avanzar en una relación constructiva y de futuro que beneficie a los ciudadanos de ambos lados del Atlántico”, agregó.
El grupo conservador, que votó a favor del Acuerdo, dijo que “la UE debe aprovechar la oportunidad que ofrece este acuerdo para establecer un futuro esperanzador para las nuevas generaciones cubanas”.
Este acercamiento llega en un momento de tensión entre Washington y La Habana, después que Trump dejara sin efecto algunos aspectos del histórico acercamiento anunciado a finales de 2014 por el presidente cubano Raúl Castro y su entonces par estadounidense Barack Obama.
Trump anunció el viernes en Miami, ante la comunidad cubana y rodeado de anticastristas, el endurecimiento del embargo vigente desde 1962, la limitación de los viajes y la prohibición de negocios con empresas cubanas administradas por militares. El jefe de la Casa Blanca calificó de “brutal” al régimen cubano y lo urgió a liberar a los presos políticos.