La defensa de San Lorenzo fue demasiado para Quilmes
La telaraña del local llevó a los de Mar del Plata a anotar apenas un punto en el segundo cuarto del partido.
San Lorenzo continúa edificando su estatus de gran candidato a volver a calzarse la corona en la Liga Nacional de Básquetbol. Con pasajes de gran juego, pero sobre todo con una defensa asfixiante y súper efectiva, le ganó 78-55 a Quilmes y se puso 2-0 en la final de la Conferencia Sur, que seguirá el martes en Mar del Plata.
No hay muchas cartas por esconder a estas alturas de la Liga. Quilmes debería estar muy arriba para superar a San Lorenzo. No podía permitirse fallar demasiado. Podía hacerlo contra Bahía, podía hacerlo contra Ferro, pero no contra el equipo de Julio Lamas, porque los de Boedo tienen demasiado y, tarde o temprano, hacen pagar los errores.
La defensa azulgrana comenzó a desgastar a los quilmeños no sólo en el perímetro, donde más se lucen los de Javier Bianchelli, sino también en
la pintura. Sólo porque el local estuvo también errático desde la línea de 3 (3-18 entre ambos equipos), la diferencia no fue mayor.
Pero el segundo cuarto depararía una de las grandes sorpresas estadísticas de la Liga Nacional: por segunda vez en la historia, un equipo anotó
un solo punto en un cuarto. Quilmes imitó lo que había hecho Obras ante Peñarol en la temporada 1998/99. Entre Nicolás Aguirre, Matías Sandes y Mathias Calfani (16), tejieron una telaraña psíquica y basquetbolística de la que Quilmes jamás pudo escapar: 0-13 intentos de cancha y 1-4 libres. Maximiliano Maciel fue el único que anotó para la visita en ese lapso.
El partido de San Lorenzo, donde Gabriel Deck anotó 15 tantos, no fue perfecto, de todos modos. Si Aguirre (1-7), Marcos Mata (1-6), Santiago Scala (1-6) y Selem Safar (3-10) hubieran estado más finos frente al aro, los porteños podrían haber construido una goleada histórica. Porque en todos los aspectos San Lorenzo pasó a Quilmes por encima. Los rebotes, los puntos en transición, el contraataque...
Por eso no sorprendió que el Polideportivo Pando se repitiera en aplausos. Fue lo que generó su equipo en la gente, que se fue cada vez más confiada en que el gran candidato se viste de azulgrana.