“Hay que mantener en la Web la profundidad del diario impreso”
“Fuimos y somos uno de los diarios de referencia de mayor difusión en español. Y ahora uno de los que compite por el liderazgo de los newsites en español”, dijo Ricardo Roa, editor general adjunto de Clarín.
Una de las paradojas de este proceso transformador es que “el papel es nuestra plataforma para crecer en digital y es una traba para crecer en digital: el diario impreso nos da recursos y a la vez nos condiciona para poner todo el foco en lo digital”.
Roa sostuvo que “estamos apren- diendo a resolver esa contradicción y aprendiendo a hacer periodismo
digital de calidad. Esto es: manejar la edición continua y decidir en cada momento la jerarquía informativa, el enfoque y la producción de los materiales de la web manteniendo la profundidad del impreso”.
Para el editor es un mito que “en la web funciona sólo lo superficial. Tenemos un millón de lectores que consumen nuestro site con un tiempo de permanencia superior a la media del papel. Ese público es muy importan- te para nosotros”.
¿Por qué es importante? Porque “comprender qué demandan los lectores más fieles es esencial para que se conviertan en suscriptores digitales”. Clarín es el primer diario que ha implementado aquí un sistema de suscripción digital como el del The New York Times.
Roa dijo que “también estamos aprendiendo a usar la potencia y el ritmo del medio audiovisual. Su combinación con la profundidad del texto es una fórmula excitante de pe- riodismo, es el periodismo total”.
Habló de la publicación de videos (“que no es lo mismo que en la TV: duración, ritmo de edición, titulación, videos que se ven y no se escuchan”), del aprendizaje imprescindible de “toda la jerga de las métricas digitales” y de la necesidad de “rechazar viejos y nuevos prejuicios para cambiar nuestra forma de trabajar y familiarizarse con los formatos periodísticos digitales”.
Otra clave: “seducir lectores que teníamos muy lejos de nuestro diario. Y que tienen intereses culturales o ámbitos informativos distantes. Tenemos que abrir nuestras cabezas para producir y seleccionar contenidos que nos acerquen a estos nuevos lectores. En otras palabras: ser capaces de producir una oferta combinada de información con contenidos de entretenimiento que atraigan a la gente por su amenidad y calidad”.
Clarín se ha propuesto “generar contenidos de interés para lectores que están en un perímetro mucho más amplio que el del impreso. El 22% de nuestro tráfico llega del exterior. En el impreso elegimos las apuestas informativas pensando en la Argentina. Ahora tenemos que decidirnos por todo el mundo que habla en español”.
El editor de Clarín analizó el trabajo con las redes sociales “que son prioridad. Hay que entender a fondo cómo funcionan y cómo aprovecharlas. Ya no basta con hacer llegar nuestras notas al taller: los periodistas nos ocupamos de la distribución de los contenidos. Y hay que hacerlos llegar al máximo de gente posible. Estamos aprendiendo, en fin, a hacer un periodismo más complejo y más rico. Un mejor periodismo”.