Hallan $ 11 millones en la feria de Castillo y lo investigan por lavado
Allanaron sus oficinas cuando ya estaba preso por asociación ilícita. Tenía armado un “búnker” blindado.
Mientras esperaba para declarar frente al fiscal que lo acusa de liderar una banda que extorsionaba a puesteros, Jorge Castillo sumó un nuevo dolor de cabeza: un juez federal allanó sus oficinas y encontró 11 millones de pesos. El operativo fue parte de otra causa que debe afrontar “El Rey de La Salada”, en la que se lo imputa por evasión impositiva. Ese expediente puede traerle más complicaciones: fuentes judiciales confirmaron a Clarín que también será investigado por lavado de dinero.
El allanamiento, ordenado por el juez Federico Villena, comenzó el miércoles a la noche y se extendió hasta la madrugada. Agentes de la Federal y de Gendarmería rompieron una cortina metálica para ingresar al predio de Punta Mogote, la feria más grande de La Salada. En los tres pisos ocupados por las oficinas administrativas, donde trabajaban unas 30 personas bajo la dirección de Casti- llo, los policías tuvieron que derribar ocho puertas blindadas que estaban escondidas detrás de falsos muebles. “Era un búnker. Al correr repisas o placares encontramos las puertas que protegían las habitaciones, en las que estaban guardadas las cajas de seguridad”, explicó a Clarín una fuente de la investigación.
Adentro de las diez cajas de seguridad los policías hallaron 11 millones de pesos. Además secuestraron 6.000 dólares, computadoras y documentación. Entre los papeles había títulos de una flota de autos compuesta por una camioneta Dodge Ram, un Audi Q7 y un Mercedes Benz ML 350, entre otros modelos.
La causa que dio lugar al allanamiento se inició en marzo de 2015, tras una denuncia de la AFIP por evasión impositiva. Los investigadores ya habían realizado seis operativos en otras oficinas de Castillo. Pero aún no habían podido ingresar a La Salada. “Es un lugar complejo y se sabía que con Castillo libre había riesgo de perder pruebas valiosas. Tras su de- tención, en el marco de otro expediente, se decidió avanzar y entrar al predio de Punta Mogote”, explicaron voceros del caso.
El juez Villena aún no tiene fecha prevista para indagar a Castillo, quien hasta el momento está imputado por evasión impositiva. Sin embargo, su situación se podría complicar en las próximas horas. “Hay que analizar la documentación. Por el volumen de las pruebas secuestradas y los primeros elementos evaluados, se puede ampliar la investigación a lavado de dinero y a otros delitos”, aseguraron fuentes judiciales.
En el momento en el que policías y gendarmes entraban en sus oficinas, Castillo ya pasaba su primer día en prisión. Lo habían detenido el miércoles a la madrugada en un country de Open Door, en la localidad bonaerense de Luján, donde compró una lujosa mansión con pileta, cancha de tenis y una fuente en la rotonda de acceso. Cuando llegaron los agentes, se resistió a los tiros.
Ayer a la tarde, “El Rey de La Salada” fue indagado por el fiscal Sebastián Scalera, acusado por ser jefe de una asociación ilícita que alquilaba
unos 7.000 puestos ilegales, extorsionaba a feriantes, cobraba bonos por “seguridad” y “limpieza”, y manejaba una amplia red de “trapitos”.
Según los investigadores, “Los Chaqueños”, la banda que lideraba Castillo, era una de las tres que operaba en Ingeniero Budge. Otra era integrada por barrabravas de River y manejada por Adrián Castillo, sobrino de “El Rey de La Salada”, y una tercera tendría como cabeza a Leandro “Cuco” Gaitán, un joven que ganó poder en la zona los últimos años. Al cierre de esta edición, “Cuco” continuaba prófugo.