Índice de optimismo: siguen sin repuntar los números para el Gobierno
El índice de optimismo sigue sin levantar para el Gobierno de Mauricio Macri. Luego de que creciera el pesimismo político la semana pasada, la tendencia se confirma y se arrastra a lo económico, que era uno de los aspectos que había tenido un repunte: ambos cayeron entre 0.3 y 1 punto, según el relevamiento de Management and Fit. “En términos políticos, el subíndice de clima retrocede 1.2 puntos con una caída significativa en la percepción sobre la eficiencia del gasto pú- blico”, explicó a Clarín Juan Pablo Hedo, de la consultora.
El número coincide con una semana que tuvo una noticia difícil de digerir para todo el gabinete de Macri: pese a las expectativas que se habían generado, Argentina no logró mejorar la clasificación financiera de sus acciones, y la tan esperada recategorización a “mercado emergente” nunca llegó. Hoy el país sigue siendo un mercado de frontera según la calificación del banco Morgan Stanley.
Esto da la percepción de que las in- versiones se seguirán demorando más de lo que desea el Gobierno, además de generar un desplome de las acciones argentinas.
“A pesar de que el mercado de renta variable de Argentina alcanza la mayoría de los criterios para ser Mercado Emergente, aún debe evaluarse la irreversibilidad de los relativamente recientes cambios”, explicó en un comunicado el banco de inversión Morgan Stanley.
Uno de los indicadores que evalúa Management and Fit apunta a conocer si la gente cree que Mauricio Macri gobierna para sectores particulares o por el interés general: este indicador cayó 1.5 puntos. “La visión a futuro de la fortaleza del liderazgo presidencial cae 1.2 puntos”, agregó Hedo.
Otro dato a tener en cuenta es que ll optimismo político acumula con es- ta cuatro semanas de caídas constantes. O sea, en un mes, el optimismo político cayó casi 3 puntos y el económico apenas uno. Las variables económicas no cambiaron demasiado, registrando una caída de apenas 0.3 puntos.
Esta caída también coincide con una mala noticia económica al menos para los consumidores: la semana pasada se supo que a partir de julio las naftas podrían aumentar un 3% o más. Es un rubro sensibles porque no solo afecta a los automovilistas sino a los sectores productivos que tienen que trasladar sus productos en camiones y al transporte de pasajeros. El combustibles es un rubro sensible porque al subir sus precios, puede generar inflación en la gran parte de los sectores de la economía. El índice de optimismo, por ahora, no le está jugando a favor al Gobierno.