Ciudad: la huelga docente se sintió poco, pero amenazan con más medidas
Serían después de las vacaciones de invierno. Los gremios pararon ayer en reclamo de mejoras salariales.
Mañana habrá una nueva reunión. Propondrán un aumento similar al de Provincia
Esteban de Luca de Balvanera, donde el día número 11 de paro docente en lo que va del año en la Ciudad no se sintió. Según pudo comprobar Clarín en una recorrida por más de una decena de escuelas públicas de la Capital, esa no fue la única con clases: la gran mayoría de los maestros no se adhirieron al reclamo de los gremios y, aunque hubo excepciones, los alumnos terminaron cursando con normalidad.
Si bien los sindicatos que representan a los docentes porteños, como el mayoritario UTE-Ctera, estimaron "en un 90 por ciento" la adhesión al paro, este diario sólo encontró dos colegios con alto acatamiento a la medida de fuerza: la tradicional escuela N° 2 Mariano Acosta de Balvanera Sebastián Lozano slozano@clarin.com Padres de mirada orgullosa sentados en las gradas, nenes corriendo disfrazados con galera y bastón, nenas vestidas de dama antigua y los maestros –todos– entregando pastelitos y empanadas por el acto del Día de la Independencia. Ese era el panorama de esta mañana en la escuela N° 1 D.E. 6 (apenas acudieron dos docentes y casi ningún alumno) y la escuela N° 3 D.E. 7 Primera Junta de Caballito, donde la puerta de entrada estaba cerrada y se veían las aulas vacías. Para las autoridades porteñas, la adhesión al paro fue del 23%. La reticencia a hablar con la prensa fue una constante por parte de los directivos, que elegían comunicar a través de los auxiliares o directamente no dar información sobre el acatamiento. Esto último ocurrió la escuela N° 13 Fray Mamerto Esquiú de Barracas, en cuyo interior se veía muy poco movimiento. En la escuela N° 8 D.E. 5 Carlos Vergara, ubicada a pocas cuadras, el panorama era más alentador para padres desprevenidos: la puerta estaba abierta y recibían a los alumnos como cualquier otro día. Según dijo la portera, apenas un tercio de los maestros acataron la medida.
En la escuela N° 7 Juan de Garay, también de Barracas, explicaron que, a diferencia de paros anteriores, esta vez "todos los maestros se presentaron a trabajar". "La verdad es que es- chos gremios distintos. Cada uno es libre de decidir. Esta vez vinieron todos y se dictaron clases sin problemas", explicó el portero de la popular Escuela Técnica Ingeniero Luis Huergo de Caballito.
El paro de 24 horas, impulsado por los gremios UTE-Ctera, ADEF, AEP, AMET, Ademys, Camyp, Sadop, Sedeba y UDA en rechazo al ofrecimiento salarial del 19% y a lo que consideran
un "cierre unilateral" de la paritaria por parte del gobierno porteño, incluyó además una movilización hacia la Legislatura. Los gremios, además, ya amenazan con volver a parar después de las vacaciones de invierno en caso de no recibir una respuesta positiva de parte de la administración de Horacio Rodríguez Larreta.
Justamente, el jefe de Gobierno confirmó que convocará a los docentes a una reunión mañana, en la que harán “una propuesta igual a la de la provincia” de Buenos Aires, “porque la inflación está siendo más alta de lo que estaba previsto”. La nueva propuesta consiste en un 21.5% de aumento más otras sumas que llegan a
una cifra cercana al 25%, que sería equivalente a la ofrecida por el gobierno de María Eugenia Vidal. tamos sorprendidos. Antes solían faltar muchos", señaló una secretaria en la puerta del establecimiento. Similar era la situación en la escuela N° 23 General Belgrano de Almagro y en la escuela N° 1 D.E. 03 de San Telmo, adonde no fueron apenas "uno o dos docentes". "En los últimos paros no había venido casi nadie", explicaron en la entrada del lugar.
A las 8 de la mañana, hora de entrada habitual a clases, el movimiento en la escuela 16 Eustaquio Cárdenas de Constitución era el de un día nor
mal. "Hubo un 60% de acatamiento, mucho menos que en las huelgas anteriores. Los chicos igual vinieron casi todos, así que vamos a ver cómo nos arreglamos", dijeron las docentes que esperaban en la puerta. El acatamiento a la medida fue aún
menor en las secundarias de la Ciudad. "Al ser una escuela técnica, los profesores están agrupados en mu-