Clarín

Por fin Mina se va a Cerro Porteño y así le abre la puerta a De la Cruz

“Me encantaría jugar en River”, dijo el hermano de Carlos Sánchez. Si no viene Vangioni, llegaría Alexis Soto (Banfield).

- Maximilian­o Uría muria@clarin.com

La voz de Nicolás De la Cruz del otro lado del teléfono se confunde entre risas y gritos que se escuchan muy cerca de él. “Estoy en un yate con amigos y con mi señora, a punto de navegar un rato. Ya hablé demasiado”, le dice el uruguayo, con humildad y respeto, a Clarín. Y rápido suelta: “Te voy a decir lo que dije en todos lados: me encantaría jugar en River”.

Tiene razón De La Cruz: ayer habló por todos lados. Su deseo de jugar en River está latente y lo hace saber. Son varios los motivos que impulsan a este uruguayo de 20 años. El primero y fundamenta­l es que será padre en diciembre y pretende quedarse cerca de su país hasta que nazca su hijo. Segundo, el sueño de jugar en un grande de América. “Es un equipo importante que apuesta a todo. Como equipo grande que es tiene que ganar el torneo local, la Libertador­es y todo lo que se le ponga adelante. Y eso es motivador. Hoy por hoy, mi sueño es jugar en River”, aclaró. Y por último, quiere copiar los pasos de su hermano (por parte de la madre), Carlos Sánchez, quien fue figura del elenco de Núñez en la Copa Libertador­es de 2015. “Tengo una relación muy linda con Carlos porque compartimo­s la pasión por el fútbol. Un par de veces lo fui a ver a los entrenamie­ntos cuando jugaba en Argentina y me pude sacar una foto con Gallardo”, contó De la Cruz. Ahora la cuestión se invirtió: el Muñeco es quien anhela poder tener cerca al mediocampi­sta.

Deben suceder un par de cuestiones para que De La Cruz firme con Ri-

ver. Recién la semana que viene se definirá su futuro. El representa­nte del jugador, Paco Casal, está en Europa tratando de vender al volante de Liverpool, que pretende 12 millones de dólares por el pase. Hay ofertas concretas de Milan, de PSV de Holanda y de Valencia. Una de las condicione­s que pone en la mesa el apoderado es conseguir un préstamo para jugar en River por un año. “Por ahora soy jugador de Liverpool. Sé que mi representa­nte maneja un par de alternativ­as. Una vez que compren mi ficha, la prioridad la va a tener River porque yo me pienso quedar en Sudamérica”, señaló. Marcelo Gallardo ya habló con De La Cruz, tal como lo hace con todos los jugadores que pretende. “Me dijo que quería que escuchara de su boca que quieren contar conmigo. El resto de lo que hablamos prefiero quedármelo para mí”, se sinceró.

En caso de confirmars­e el arribo del uruguayo, River tiene que liberar un cupo de extranjero, aunque esto ya no es conflictiv­o: Arturo Mina fue

vendido a Cerro Porteño. El conjunto paraguayo pagará un millón de dólares, en tres cuotas, por el 30 por ciento del pase. En principio River quería vender el 70 por ciento de la ficha que tiene, pero finalmente aceptó el ofrecimien­to guaraní. Otro que podría liberar cupo es Iván Alonso. El uruguayo de 38 años tiene sondeos de un equipo de su país y también de Murcia, de España, donde jugó desde 2004 hasta 2008. Tampoco descarta retirarse de la actividad.

Respecto a Leonel Vangioni, no hubo novedades. El lateral de Milan tiene ofertas de clubes de Europa dispuestos a pagar por su préstamo. River no pondrá dinero. Por eso, otra alternativ­a para el puesto es Alexis So

to, de Banfield. ¿Se activará un canje entre Soto y Nicolás Bertolo?

¿Posibles partidas? Ayer circuló que Roma vendrá a la carga por Lucas Alario y que estaría dispuesto a pagar 20 millones de euros. Por lo bajo, los dirigentes de River aclaran que se sentarán a hablar si ponen 24 millones de euros por el pase del goleador. ¿Arrancará otra novela? w

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