Tras la consulta, la oposición se endurece y llama a un paro nacional
Fue convocada por la Mesa de Unidad Democrática para el jueves. La alianza organizó el contudente referéndum contra Maduro, del que participaron 7,6 millones de personas.
Fue convocado por la alianza opositora para pasado mañana y será por 24 horas. La decisión se tomó un día después del referéndum en el que 7,6 millones de ciudadanos votaron contra el presidente Nicolás Maduro. El gobierno chavista minimizó la ofensiva de la oposición y confirmó que llevará adelante la Asamblea Constituyente prevista para el 30 de julio y que pretende allanar el camino para reformar la Carta Magna. También se anunció la continuidad de las marchas y las protestas callejeras que ya llevan más de 100 días y 95 muertos.
Más de siete millones de votos es un capital político que la oposición venezolana no piensa desaprovechar. Un día después de la exitosa consulta popular contra la Asamblea Constituyente de Nicolás Maduro, el vicepresidente del parlamento Freddy Guevara llamó a un paro general para el 20 de julio. “Convocamos a todo el país a que este jueves asumamos en protesta pacífica y sin violencia un paro cívico nacional de 24 horas”, dijo.
En representación de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), el diputado Guevara también dijo que mañana se publicarán los primeros pasos para “conformar un gobierno de unidad nacional”. El objetivo, “enfrentar el fraude constituyente y lograr la restitución del orden constitucional”.
Reforzados por el referéndum del domingo, los opositores también anunciaron que hoy comienza un proceso que culmina el viernes para nombrar a los nuevos magistrados del Tribunal Supremo de Justicia. La MUD no reconoce la legitimidad de los actuales jueces, cuya corte acusan de someterse a Maduro. Asimismo, la MUD aseguró que mantendrá las protestas en las calles.
Desde el chavismo cuestionaron la legitimidad de la consulta. Según el alcalde del municipio Libertador (Caracas), Jorge Rodríguez, los organizadores “multiplicaron por tres” los votos obtenidos. De acuerdo con su cálculo, votaron poco más de 2 millones de personas, 5 millones menos que el número publicado por la oposición. También dijo que en el exterior sólo hay 102.000 venezolanos registrados con capacidad de votar, pero “ellos (los opositores) dicen que votaron 693.000”.
El principal objetivo de la consulta de ayer era evitar la elección el 30 de julio de los 545 miembros de una Asamblea Constituyente que, según la oposición, sólo es una estratagema de Maduro para perpetuarse en el poder. El diputado Guevara también pidió a los ciudadanos que se presenten mañana en los más de 2 mil centros donde votaron el domingo para formar “comités de la Hora Cero”. “Núcleos de organización popular”, los llamó, para “restablecer el orden constitucional”.
El desafío de la MUD, con mayoría en el parlamento desde enero de 2016, es cumplir con los tres mandatos que los 7,6 millones de electores dieron el domingo: rechazar la Constituyente, en primer lugar; hacer que la fuerza armada cumpla con la Constitución, en segundo; y convocar elecciones transparentes y un gobierno de uni- dad nacional.
“Tras esta contundente manifestación pacífica, constitucional y democrática, lo que debería hacer Maduro es cancelar la Constituyente en las próximas horas”, dijo el gobernador del Estado de Miranda que en 2013 rivalizó con Maduro por la presidencia, Henrique Capriles.
Sin embargo, Maduro aseguró anoche que mantendrá la convocatoria a la Asamblea Constituyente. “No nos importa lo que diga Europa”, dijo el mandatario, en alusión al llamado que hizo la Unión Europea a deponer dicha contienda en vista del resultado del plebiscito.
El secretario de Acción Democrática y ex presidente del Parlamento, Henry Ramos Allup, felicitó al pueblo venezolano por la jornada electoral pero lanzó una advertencia: “Debemos ser prudentes con el triunfo y administrar bien la victoria”. Julio Borges, presidente de la Asamblea Nacional, dijo que millones de electores habían “revocado a Maduro”. “Por eso no quería el referéndum revocatorio y lo suspendió el año pasado”. Otra consecuencia del referéndum del domingo fue la declaración de Vicente Fox como persona non gra
ta para Venezuela. Junto a otros cuatro ex presidentes hispanoamericanos, el ex presidente de México participó en la consulta como observador. Después de salir del país, el gobierno prohibió que volviera a entrar por ser un “agente perverso que viene a provocar muerte y destrucción”.