Corea del Sur sorprende y propone reanudar negociaciones con Norcorea
De llevarse a cabo, sería la primera reunión en más de dos años. Aún no hay respuesta del régimen de Kim.
En un inesperado anuncio, Corea del Sur propuso ayer a su vecino del norte reunirse en la localidad fronteriza de Panmunjon − en el corazón de la zona desmilitarizada entre las dos Coreas− con el objetivo de aliviar las tensiones entre ambos países y reanudar las negociaciones, congeladas oficialmente hace más de dos años.
En caso de que la reunión tenga lugar, sería el primer encuentro entre autoridades militares de ambos países desde octubre de 2014, tras el congelamiento de cualquier tipo de negociaciones desde diciembre de 2015. El anuncio del Sur significa, dentro de la comunidad internacional, un intento diplomático para darle una salida al conflicto coreano, hoy marcado por la reciente prueba de un misil intercontinental de Pyongyang, y los ensayos militares entre Seúl y Washington en el Mar de Japón. El anuncio del Sur también incluye retomar las reuniones de familiares separados desde la guerra, en un operativo humanitario organizado por la Cruz Roja para el 1 de agosto.
Este es el primer intento del nuevo gobierno de Moon Jae-in, inaugurado en mayo de este año, para acercarse al régimen de Kim Jong-un. El gobierno surcoreano propuso llevar a cabo las conversaciones en el llamado “Pabellón de la Paz”, un edificio en la frontera desmilitarizada que actualmente está bajo control norcoreano, en lo que pretende ser un guiño a Pyongyang.
La propuesta se veía venir tras el discurso del presidente Moon en Berlín, realizado a principios de este mes, donde el mandatario invitó a rebajar tensiones y ofreció reunirse con el líder norcoreano “en cualquier mo- mento y en cualquier lugar”, si se daban las condiciones adecuadas.
Tras llegar al poder en mayo, el liberal Moon ha buscado acercarse al Norte tras diez años de pésimas relaciones con los gobiernos conservadores de Seúl. La nueva medida se distancia de la de sus predecesores, quienes ejercían una política bastante más dura y confrontacional con respecto al Norte.
Según explicó ayer el viceministro surcoreano de Defensa, la reunión busca poner fin a “cualquier acto de hostilidad” a lo largo de la frontera ante el aniversario del alto el fuego que puso fin a la guerra de Corea en 1953, cuyo 64° aniversario es el próximo 27 de julio.
Varios analistas consideran probable que Pyongyang acepte la oferta, aunque posiblemente pida retrasar la fecha del encuentro para preparar el terreno.
Por el momento no se ha publicado una agenda para la reunión, pero se espera que el Sur proponga que ambos países apaguen sus respectivos altavoces destinados a radiar propaganda en la frontera, los cuales se mantienen operativos desde el penúl timoensayo nuc le a r d e Pyongyang, en enero de 2016.
Por el momento, el Consejo de Seguridad de la ONU y la Unión Europea analizan un nuevo paquete de sanciones. Japón, por su lado, se mostró contraro a la propuesta del presidente Moon y aseguró, tajante, que “no es tiempo de diálogo. Es tiempo de presionar”.