Vuelve de Italia para seguir en Boca
Angelici igualó la oferta del Genoa y el delantero se queda. Lo pidieron el DT y sus compañeros.
En medio del torneo pasado, cuando lesiones de algunas de sus figuras le impedían repetir la formación de una fecha a otra, le preguntaron a Guillermo Barros Schelotto si no extrañaba aquel equipo de memoria armado por Alfio Basile en 2005/06, aquel que ganó hasta los torneos de verano. "No,
porque yo no jugaba", respondió el ahora DT, suplente del por entonces imparable Rodrigo Palacio. Más allá de su comentario risueño,
el Mellizo -como cualquiera de sus colegas, sin distinción de edades y estilos- se siente cómodo cuando encuentra a 11 jugadores que satisfacen su pretensión y puede mantenerlos.
Ayer, mientras desayunaba en el Complejo Internacional de Minga Guazú, en Ciudad del Este, Barros Schelotto se enteró de que Adrián Ricardo Centurión -24 años, 22 presencias y ocho goles en el último certamen, uno de sus titulares- volvía de Génova para sumarse a la pretemporada que el campeón argentino realiza en Paraguay desde esta semana.
Con Centurión disponible, Guillermo sólo espera que se resuelva favorablemente la situación del lateral Jonathan Silva (regresó al Sporting de Portugal, pero quiere volver a Boca)
para tener a diez de los 11 con los cuales terminó logrando su primer título con técnico xeneize. La única variante sería la del repatriado Paolo Goltz -uno de sus líderes en el Lanús campeón de la Sudamericana 2013por el cumplidor Fernando Tobio.
¿Para qué viajó el delantero a Italia si su deseo era quedarse en nuestro
país? Porque Genoa le había hecho una oferta al San Pablo y a los brasileños les cerraba esa cantidad. Boca igualó la propuesta: cinco millones de dólares, de los cuales un 30% le corresponde a Racing (aceptaría a cambio la cesión de Walter Bou) y el 70% restante a los brasileños. La voluntad del jugador inclinó la balanza. ¿Se compra un problema a plazo fijo el club con Centurión? Uno de los dirigentes que más insistieron por re
tenerlo ofrece sus argumentos: "Futbolísticamente hay poco para discutir: va al frente, gambetea, aguanta patadas... Hasta te diría que su cotización no es alta si lo comparamos con el dinero que paga hoy nuestro mercado por jugadores de menor nivel. El tipo, además, muere por esta camiseta". ¿Y su conducta fuera de la cancha? "No es el único con situaciones difíciles. Puedo contarte de dos jugadores de clubes grandes que también tienen sus líos judiciales, aunque no hayan trascendido tanto. Uno está lesionado desde hace rato y otro se fue del país", revela la misma fuente con un toque de misterio.
El pedido del entrenador y la aprobación del plantel fueron determinantes para que Centurión inicie su segunda temporada en la institución. En los foros de Twitter, donde #Cen
tu fue trending topic durante casi todo el día, la decisión del muchacho nacido en Avellaneda fue recibida con mucho entusiasmo. Por los de Boca, naturalmente. Un fanático de River también se
habría alegrado por la noticia. Los que frecuentan Ezeiza aseguran que Jorge Sampaoli tiene agendado a Ricky. Al DT de la Selección le interesan su verticalidad, el cambio de ritmo y el sacrificio para correr hacia atrás. A 40 días del crucial choque por las Eliminatorias con los uruguayos en el Centenario, es mejor contar con todos los recursos a mano.
Los hinchas xeneizes le valoran a #Centu aquel gol en tiempo agregado en el Monumental, una actuación decisiva en San Juan para recuperarse de la caída con Talleres, su gambeta desequilibrante para romper el ordenado bloque de Defensa y Justicia, la voluntad de jugar aun lesionado y, de manera especial, su eufórico festejo en Bahía Blanca cuando Boca se aseguró el título. Ni siquiera le reprochan la reacción contra Teo Gutiérrez, causante de su única expulsión.
Ricardo usa el número que lucieron varios de los máximos ídolos boquenses de la historia, desde Rojitas hasta Riquelme, pasando por el Ca
bezón Potente, Maradona, el Beto Márcico y Tevez.
Al margen de comparaciones fuera de época y de críticas a su comportamiento como ciudadano común, a Centurión ese 10 le queda bien.