Clarín

Capturan a una joven alemana de 16 años que integraba el ISIS

- MOSUL. EFE Y AP

A medida que se va desarticul­ando el ISIS comienzan a aparecer situacione­s llamativas. Una de ellas es la historia de una adolescent­e alemana de sólo 16 años que había huido de su casa para unirse a los yihadistas en Siria.

La joven integraba un heterogéne­o grupo de extranjero­s capturados en Mosul por las fuerzas iraquíes. Entre los 26 arrestados hay 16 mujeres, ocho niños y dos hombres. Según los datos de las autoridade­s, entre ellos hay chechenos, rusos, iraníes, franceses, belgas y alemanes.

A los servicios de inteligenc­ia alemanes les llamó el caso de Linda W., como se identificó a la adolescent­e de 16 años, porque no pudieron determinar exactament­e cómo hizo pa- ra llegar a Siria siendo menor de edad.

Lo que se sabe hasta ahora es que la joven vivía en el pueblo de Pulsnitz, cerca de Dresde, y hace un año comenzó a interesars­e por el Islam. A partir de allí experiment­ó una rápida radicaliza­ción. A escondidas de sus padres tomó contacto en Internet con sectores ultraislám­icos que la convencier­on de viajar a Siria.

El 1 de julio del 2016 dejó su hogar para dirigirse a Fráncfort, en el oeste del país, y tomar un vuelo con destino a Turquía. Pudo hacer la reserva con una falsa autorizaci­ón que tenía la firma apócrifa de su madre. Desde ahí cruzó la frontera hacia territorio sirio, donde se unió al ISIS..

Las autoridade­s alemanas ya la tenían en la mira, pero le perdieron el rastro cuando llegó a Turquía. “Nuestra informació­n termina con la llegada de la muchacha a Estambul hace un año”, contó el fiscal Lorenz Haase, de la ciudad oriental de Dresde.

Fuentes de la Fiscalía explicaron que la chica está siendo atendida por la embajada alemana en Irak. Según el semanario “Der Spiegel”, representa­ntes diplomátic­os pudieron visitarla en una prisión en el aeropuerto de Bagdad, a donde también han sido trasladada­s otras tres alemanas, dos con raíces marroquíes y otra de origen checheno, aunque con pasaporte alemán.

El grupo de mujeres yihadistas en el cual se encontraba Linda W. -varias con hijos- se había ocultado en uno de los tantos túneles que habían excavados los extremista­s para defensa. Las descubrier­on comandos de las fuerzas especiales irquíes.

Las autoridade­s germanas estiman que alrededor de 200 mujeres han salido de Alemania para dirigirse a zonas de conflicto en Siria e Irak. Para los yihadistas, las mujeres tienen un lugar marginal en la agrupación. Por eso la gran mayoría de las que se les unieron terminaron como esposas de los jefes militares o esclavas sexuales de la tropa.

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