El Central limita el ingreso al sistema financiero de empresarios del juego
El Directorio del Banco Central aprobó ayer una norma que fija restricciones a las empresas dedicadas a
los juegos de azar y a sus accionistas para ser, a su vez, accionistas y/o directivos de entidades financieras. La normativa vale de ahora en ade
lante, es decir que no altera las posiciones que hoy tienen, por ejemplo Cristóbal López en el banco Finansur y la familia Ick en el Banco Santiago del Estero.
A través de Indalo Inversiones, el empresario Cristóbal López -dueño de numerosas salas de bingo y casinos en todo el país- tiene el 69,8% del
banco Finansur. Es de hecho el accionista mayoritario. Lo siguen Jorge Sánchez Córdoba con el 23.3% y Jorge De María, con el 6,8%
En el caso del Banco de Santiago del Estero, Néstor Ick y familiares reunen el 28,77% de esa entidad. Ick tiene casinos y bingos en el norte del país. Según dispuso ayer el BCRA, los ac-
cionistas que posean una participación en una entidad financiera superior al 5% de su capital, no podrán
ser accionistas en una empresa dedicada a los juegos de azar y apuestas. Y a su vez, aquellas personas físicas que posean participación accionaria en esas empresas, aún en un porcentaje mínimo, no estarán habilitadas para ser directores, síndicos ni para ocupar cualquier otro cargo de relevancia en una entidad financiera.
Las limitaciones para tener participaciones en ambos sectores, el financiero y el de los juegos de azar, se evaluará tanto de manera directa como a través de personas vinculadas, según la normativa vigente.
Estas medidas tendrán efecto para las solicitudes de autorización de nuevas entidades financieras, de negociaciones de paquetes accionarios y de solicitudes de designación o renovación de autoridades de entidades financieras que en el futuro se presenten ante el BCRA.
La decisión del BCRA fue establecida siguiendo recomendaciones internacionales relativas a la prevención del lavado de dinero, en consideración del mayor riesgo que implica la vinculación de los juegos de azar con el sistema financiero, en relación a otras actividades económicas.