River tampoco definió al arquero titular: arranca Lux y espera Batalla
Germán jugó de entrada los amistosos de pretemporada e irá desde el inicio ante Guaraní, por la Copa.
El “arco más grande del mundo”, definido así por Amadeo Carrizo, el arquero más emblemático de la historia del fútbol argentino, busca dueño. Y si bien hoy cuando River enfrente a Guaraní, el que se parará debajo de los tres palos millonarios será Germán Lux, deberá ganarse las llaves dentro de la cancha con buenos rendimientos. Es que Marcelo Gallardo no dijo públicamente quien sería el titular. Apuesta a la competencia. Una competencia que lo tiene hoy un escalón por debajo a Augusto Batalla y, más atrás, a Enrique Bologna.
“Acá va a haber mucha competencia. Nadie podrá relajarse. Tengo tres muy buenos arqueros de los cuales uno, lógciamente, va a arrancar atajando. Pero no quiere decir que el que empiece termine jugando. Tendrá que demostrarlo adentro de la cancha”, repitió una y otra vez Gallardo en la pretemporada que el plantel realizó en Orlando. Lo cierto es que en los dos amistosos (contra Orlando City y frente a Soccer Institute at Montverde Academy) que River jugó en Estados Unidos el que empezó atajando para los titulares fue Lux. “El que mejor encaje en el funcionamiento del equipo será el que ataje”, afirmó el entrenador.
Hasta el momento, ese arquero es Lux, quien regresó hace poco más de un més a River luego de una década en el fútbol español (jugó en Mallorca y en La Coruña). Poroto ya sabe lo que es estar en ese lugar ya que surgió de la cantera millonaria. Debutó en Primera en 2002 y dos años después se ganó la titularidad. Ahora, la experiencia y el recorrido que tiene lo llevan a ocupar de nuevo ese espacio.
A diferencia de lo que ocurrió hace un año, esta vez Gallardo no salió a confirmar públicamente quién iba a ser su titular. En mayo del año pasado, cuando Marcelo Barovero se fue, el Muñeco apostó por Batalla, un pibe que en ese momento tenía 20 años y que estaba en River desde antes de ingresar a la escuela primaria. “El arquero titular va a ser Batalla y el que venga tendrá que venir a competir el puesto con él”, expresó el técnico en la conferencia de prensa posterior al último partido (contra Gimnasia por la anteúltima fecha del torneo de transición 2016) de Trapito.
Sin embargo, la jugada no le salió del todo bien. Más allá de mostrar personalidad para hacerse cargo de una gran responsabilidad, Batalla no logró llegar a transmitir ese alto porcentaje de seguridad que se les exige a los arqueros de los equipos grandes. Tuvo buenos partidos y otros en los que se destacó y hasta fue figura pero falló en momentos claves y de mayor exposición. Eso le terminó jugando en contra. Gallardo lo bancó hasta el final del semestre pero entendió que necesitaba sumar otro arquero de experiencia. Y llamó a Lux, quien enseguida pegó la vuelta desde España.
“Batalla es un chico maduro y entendió que la llegada de Lux le iba a servir para potenciase. Creemos mucho en la competencia”, aseguró un integrante del cuerpo técnico.Esas palabras toman valor al observar la realidad. De hecho cuando, se supo que vendría Lux, Batalla atajó muy bien contra Aldosivi, Colón y Guaraní.
En definitiva, Lux le ganó la pulseada a Batalla y arrancará atajando en la Libertadores. Habrá que aguardar si lo hará también en la Copa Argentina y en el torneo local o si Batalla tiene su chance en algunos de esos dos certamenes para seguir peleando por “el arco más grande del mundo”.