Comidillas del día después del veredicto de las urnas
Los de Cambiemos se fueron a dormir temprano por que la mañana siguiente había que trabajar. Por otro lado, en el bunker de Unión Ciudadana se quedaron hasta las 4 de la madrugada haciendo el aguante porque ellos, segun Cristina, “no son vagos”. Claro, seguramente todos gozaban de tener el lunes franco. ¡Qué lindo país! José Traverso valdanito@hotmail.com
Señor Presidente: a pesar de creer que las PASO son un derroche innecesario de dinero, tiempo y energía, fui a cumplir con mi deber ciudadano y voté. Y a pesar de estar bastante desencantada con la gestión de Cambiemos, volví a darle mi voto de confianza.
Les pido encarecidamente a usted y a su equipo que no nos defrauden. Quienes votamos por el cambio en las últimas elecciones presidenciales, sentimos que su gobierno prometió mucho más de lo que consiguió. Para decirlo vulgarmente, hoy “no se carguen de achuras” con los resultados de las PASO.
No desperdicien esta nueva oportunidad que les da parte de la ciudadanía. No se la crean. Hagan una profunda autocrítica, evalúen la gestión con objetividad, y demuestren que verdaderamente ofrecen una alternativa confiable, que disminuya los tremendos índices de pobreza, genere trabajo y ataque el flagelo de la inseguridad. Si no lo hacen, que la Patria se los demande. Y lo hará. Irene Bianchi irenebeatrizbicnachi@hotmail.com
Los idiotas que perdieron en las PASO no lo pueden asumir, entonces acusan al gobierno de “manipulación de datos”. Supongamos que es cierto, los datos fueron manipulados. Pero eso no es delito, mientras carguen todos los datos, pueden cargarlos como quieran. Rafael E. Madero rafamadero@hotmail.com.ar
Votos más, votos menos, tengo para mí que queda sepultada una forma autoritaria de hacer política en mi país, un modo que usted impuso, señora Fernández de Kirchner. Y que lamentablemente abrió esa odiosa grieta que más de una vez me generó bronca y llanto.
Por tus conductas corruptas y por su doble discurso, que jugó siempre con el dolor y la necesidad del que menos tiene culturalmente y a quienes jorobó para toda la vida.
Estoy convencida de que quiere esa banca para tener fueros y no ir presa. Para nada más. No respetó las instituciones aquel día del traspaso de mando y tampoco hoy cuando no fue a votar, excusándote en pavadas que ya la mayo- ría no cree. A veces me pregunto si es que puede dormir cada noche con tranquilidad.
Siempre le ganó la soberbia y se creyó su propia mentira. Tanto se la creyó que en 2015 no esperaba el triunfo de otros. Así fue que quedaron muchos cabos sueltos. Ahora ya no tan sueltos... muchos están en Ezeiza.
Le hizo mucho mal al país, señora. Mire Santa Cruz y cerciórese. O si quiere haga patria de una vez y confiese sus delitos, sus negociados y devuelva toda la plata que nos robó. Laura Rotundo laurarotundo@hotmail.com
Es la mañana del día lunes post-electoral. Me desayuno con que la diferencia entre los candidatos de la Provincia es de 0,08 %. Me entusiasmo. Mi mujer me mira con superioridad de género y me advierte que gane quien gane, hay empate técnico. Nada se modifica hasta octubre. Escucho al mediodía que la doctora Fernández dice ser la ganadora. Tiene total razón: en su espacio ganó por el ciento por ciento de los votos. A igual que Randazo. Si hubiesen competido en el mismo espacio, por ejemplo el Partido Justicialista quizás salían 85,26% a 14,73%. Pero la doctora sentía que debía garantizar su triunfo. Finalmente, terminó garantizando el triunfo de dos dirigentes del espacio peronista. Hasta quizás tres. Eduardo D. Friedman edfriedman@intramed.net
La gente ha premiado en las PASO a un presidente de bajo perfil que administra de la mejor forma posible y ha dejado de lado a una “jefa” ruidosa que nos dejó con la quinta inflación más alta del mundo. Eso es madurez y sistema republicano vigente. Gustavo Gil gustavogil68@hotmail.com
Como una ventisca, las PASO limpiaron el cielo y disiparon las nubes de la duda. El Gobierno que heredara un país devastado y debiera tomar apremiantes medidas para paliar una economía desquiciada por el crónico y creciente déficit fiscal de un estado benefactor, salió airoso emergiendo fortalecido de una contienda que no lo favorecía en los sondeos previos.
La sociedad demostró madurez cívica, y optó mayoritariamente por la coherencia, la sensatez y la necesidad de un blanqueo ajustado a la realidad económica. Los ganadores piensan en el país. Los perdedores en su incierto futuro político personal. Los ganadores buscan metas. Los perdedores, excusas. Los ganadores acuerdan, concilian y dialogan. Los perdedores disputan, querellan y litigan. Mientras aquéllos apagan las cenizas humeantes, éstos reavivan las brasas ígneas de la grieta de la discordia. Carlos Augusto Bottino carlosbottino@fibertel.com.ar