Tiene 85 años y se tiró de un auto en movimiento para escapar de un robo
El jubilado forcejeó con tres ladrones y cayó en la calle. Terminó internado, con golpes leves.
Intento de robo al voleo o de secuestro. En pleno centro platense, un hombre de 85 años fue atacado por tres hombres que trataron de meterlo en un auto. El jubilado forcejeó y se tiró del coche cuando ya estaba en movimiento. Quedó tendido en medio de la calle, con heridas leves.
El violento episodio ocurrió el lunes a las 14.40, en 10, entre 44 y 45, a pocos metros de donde vive Isaac Hejtman, un abogado jubilado que todas las tardes sale a caminar por el barrio.
Según relataron los testigos, Hejtman había caminado sólo una cuadra cuando subió a la vereda un Fiat 500 color crema del que bajaron tres jóvenes. A esa hora, la zona, cercana a los Tribunales de la capital bonaerense y llena de edificios de oficinas, estaba repleta de gente. Eso no asustó a los asaltantes.
“¡Subí, hijo de puta!”, le habrían gritado al jubilado, mientras lo empujaban. “No sé de dónde sacó
fuerzas, pero hizo lo posible para evitar que lo metieran en el coche”, contó a Clarín Magdalena Casado, pareja de la víctima.
No está claro si quisieron robarle o si trataron de llevarlo secuestrado. Lo cierto es que Hejtman logró zafar y quedó golpeado en medio del asfalto. Vecinos que vieron parte de la escena lo asistieron. Llamaron al SAME y el abogado fue trasladado al hospital Rossi de La Plata. También se comunicaron con Casado, quien trabaja en una oficina a pocas cuadras y llegó enseguida para acompañarlo. Los médicos de la guardia constataron que sólo tenía
unos moretones. Fue dado de alta pocas horas después del ataque.
El abogado no hizo la denuncia. Los oficiales que llegaron con la ambulancia iniciaron una instrucción de oficio. Hasta anoche, tampoco se había presentado ante la fiscalía para ampliar el testimonio. “Estaba muy conmocio
nado y también sorprendido por la repercusión del caso. Me pidió que le dijera a las autoridades que necesita tiempo antes de realizar una declaración”, agregó la mujer.
Hejtman se retiró hace años de su actividad como abogado especializado en Derecho Civil. Vive en un edificio ubicado en 10, entre 43 y 44. “El cree que se trató de un caso al voleo. Es un hombre sencillo y tiene poca vida social. Casi no se trata con otras personas del edificio y tampoco con colegas”, contó Casado.
No obstante, tiene rutinas estrictas. Todas las mañanas, entre las 8 y las 9, va a desayunar a algún bar de la zona. Repite la práctica después de la siesta, cerca de las 15. Cuando lo atacaron iba a tomar el café de la tarde.
Mientras esperan el aporte testimonial de la víctima, en la DDI de La Plata buscan determinar si alguien del entorno habría entregado datos a los atacantes. Además, buscan a una presunta testigo que habría copiado
la patente del Fiat. “Le pedimos que se presente en la comisaría de 61 y 12 o que llame en forma anónima al 911”, explicaron. Después de que Hejtman lograra huir, el coche zigzagueó unos metros, chocó contra un auto estacionado y escapó.