Tormenta y naufragio en el Amazonas: 10 muertos y 40 desaparecidos
Fue en un afluente del río en medio de la selva. En el barco iban unas 70 personas y 25 fueron rescatadas.
Equipos de bomberos, defensa civil y de la marina brasileña lanzaron ayer una intensa búsqueda en un río de la Amazonia luego de que un barco con cerca de 70 pasajeros naufragara en un río del estado de Pará, en el norte de Brasil. Al cierre de esta edición, se habían recuperado al menos diez cadáveres, y otras 25 habían sido rescatadas con vida. Pero quedaban unos 40 desaparecidos en esas aguas correntosas en medio de la selva y comenzaban a desvanecerse las esperanzas de encontrar más sobrevivientes. Se presume que los pasajeros eran lugareños, que usan estos pequeños barcos para trasladarse en una zona de muy difícil acceso.
El barco “Comandante Ribeiro” salió del puerto de Satarém, en el oeste del estado de Pará, el lunes a la noche, y al parecer su destino final era la ciudad de Vitória do Xingu. La embarcación tenía previsto realizar escalas en las localidades de Monte Alegre y Prainha, pero naufragó en una zona de difícil acceso entre las ciudades Porto de Moz y Senador José Porfírio, en medio de una fuerte lluvia.
Al parecer, la embarcación no te- nía permiso oficial para transportar pasajeros, informó Folha de Sao Pau
lo citando fuentes de la Agencia de Regulación y Control de servicios públicos, que señalaron que el transporte era entonces “clandestino”.
Ayer a la mañana se recuperaron siete cuerpos sin vida, según fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública del estado de Pará. Entre ellos estaba el de un bebé de un año y el de un adolescente de 15 años, según informaron medios locales. Por la tarde, se informó que el número de muertos había llegado a diez.
Unas 25 personas lograron llegar hasta las orillas del río Xingu o pudieron ser rescatadas, informó Fol
ha de Sao Paulo. Todas fueron atendidas en centros de salud cercanos.
Bruno Costa, un DJ de 29 años que viajaba en la embarcación, está entre los sobrevivientes. Todavía en estado de fuerte conmoción, habló ayer con la prensa local. “Empezamos a oír explosiones en el barco y todo el mundo fue para el fondo”, contó al portal Globo.com.
“Viví momentos terribles en mi vida. La lona que se coloca para cubrir el barco cuando llueve impidió que mucha gente pudiera salir. Yo pude rescatar un nene de unos dos años, pero yo no tenía chaleco salvavidas, y el nene tampoco”, agregó el hombre. Explicó que pudo flotar y llegar hasta la costa, pero señaló que había muchos pasajeros que no tenían salvavidas, y por eso no lograron salvarse.
El accidente ocurrió en un tramo del Xingu aledaño al río Amazonas, según se desprende de las informaciones de los medios locales, cuando el barco ya había recorrido unos 350 kilómetros por las aguas de ese río. En esa región selvática, el transporte fluvial es el principal medio de transporte público. Pero en algunos casos, como al parecer ocurrió ahora, no cuentan con los permisos oficiales. En Porto de Moz, según las autoridades, el barco habría recibido 40 nuevos pasajeros, cerca de las 18 ho- ras del martes. Poco después, la embarcación atravesó una fuerte tormenta, que podría haber sido la causa principal del accidente, según las primeras investigaciones.
El cuerpo de Bomberos lanzó un importante operativo, con la participación de buzos para localizar a las víctimas, informó Folha de Sao Pau
lo. La autoridad portuaria del estado vecino de Amapá envió una lancha al lugar para colaborar en la búsque- da. La Marina envió además un buque para reforzar la operación. También viajaron desde Belén dos aviones del cuerpo aéreo de Seguridad Pública, para reforzar a los efectivos de Defensa Civil y del centro de pericias científicas del estado.
Fuentes de la Marina dijeron ayer que trabajaban con la expectativa de encontrar más sobrevivientes, aunque aclararon que el accidente había ocurrido “bastante lejos” de las costas del río amazónico, que es muy extenso y con “una fuerte corriente”.
Al mismo tiempo, la Marina y la Policía Civil abrieron dos investigaciones para analizar las causas y responsabilidades por el accidente.
Los medios brasileños recordaron que este naufragio ocurre 20 días después de un incidente similar en Pará, pero en el río Amazonas, por el que todavía quedan nueve personas desaparecidas. El episodio se consideraba hasta entonces como el mayor accidente en número de desaparecidos o muertos desde 1981, recordó Folha. El naufragio del 2 de agosto ocurrió luego de una colisión de un navio carguero contra un convoy de nueve balsas entre las ciudades de Óbidos y Oriximiná.