En medio de una interna gremial, hoy paran dos gremios docentes en la Ciudad
Había acuerdo con 15 de los 17 gremios. Pero UTE, cuyo titular se juega en 15 días la conducción de Ctera, y Ademys rechazaron el 21,5% de aumento. Es el paro número 12 del año.
“Estamos perdiendo poder adquisitivo, con cualquier índice que se tome”, dicen desde UTE.
Hace dos semanas el gobierno de la Ciudad anunció un acuerdo con 15 de los 17 gremios docentes de las escuelas públicas porteñas. Habían quedado afuera dos sindicatos: el mayori
tario UTE, perteneciente a Ctera y alineado con el kirchnerismo, y Ademys, que responde a la izquierda y que históricamente no firma acuerdos con el gobierno porteño. Estos dos gremios, que suman 10.000 afiliados sobre 60.000 docentes, convocaron para hoy a una nueva huelga en las escuelas porteñas, en rechazo al 21,5% de recomposición salarial ofrecido por el gobierno y aceptado por el resto de los gremios. Hace más de diez años que UTE no protagonizaba un conflicto docente tan prolongado en el distrito.
Con un acuerdo apenas por debajo al del resto de los gremios docentes del país; con un escenario político local en donde el oficialismo acaba de vencer con el 50% de los votos; con una negociación cerrada por casi todos los gremios del distrito, ¿qué llevó a UTE -que venía teniendo buen trato con el macrismo- a llamar a un nuevo paro a fines de agosto?
Fuentes sindicales y del gobierno lo atribuyen a la interna de Ctera - confederación nacional de gremios docentes-, que se realizará por voto
directo de todos sus afiliados el próximo 7 de septiembre. Ese día, Eduardo López, el titular de UTE (que es el gremio porteño dentro de Ctera) se juega la renovación de la conducción nacional, junto a Sonia Alesso (de Santa Fe) y Roberto Baradel (de Provincia). Todos ellos forman parte de la lista Celeste Violeta, alineada con el kirchnerismo. Del otro lado estará la izquierda de Ctera, que viene creciendo en todos los distritos. Los aspirantes a la conducción son Sebastián Henríquez (de Mendoza y perteneciente al FIT) y Romina Del Plá (de Provincia de Buenos Aires y del Partido Obrero). Del Pla había tomado relevancia pública en el mes de mayo cuando compitió contra Baradel por la conducción de Suteba, el gremio docente de Ctera en la provincia de Buenos Aires.
Para el gobierno porteño, López busca con el paro de hoy posicionar
se y mostrarse duro frente a la interna que debe enfrentar dentro de 15 días. “Este es un paro sindical, no un paro docente. Se discute una candidatura sindical”, interpretan fuentes del Ministerio de Educación. Otras voces que conocen el mundo sindical docente agregaron más datos: afirman que en Capital está creciendo la izquierda dentro de UTE y por eso la lista de López no puede mostrar debilidad ante la posibilidad de que en el recuento de votos en Capital, la lista Celeste Violeta no se imponga.
Consultado por Clarín, Eduardo López desmiente rotundamente todas estas versiones. “No hay ninguna especulación política de nuestra parte. Estamos perdiendo poder adqui
sitivo con cualquier índice de precios que se quiera mirar. Es uno de los aumentos docentes más bajos del país, aún siendo éste uno de los distritos más ricos. En realidad el aumento para el cargo simple fue de 2.000 pesos en un año. ¿ Cuánto subió la luz? ¿Cuánto subió el ABL que pagamos todos los porteños?”, agregó López.
La UTE llamó ayer a una conferencia de prensa en donde presentaron un informe que muestra la evolución del poder adquisitivo del salario docente en Capital. “Tomamos como ejemplo la leche La Serenísima en sachet en Coto. Un salario inicial de jornada completa podía comprar 1.000 litros de leche en 2007, fuimos subiendo hasta 1.500 litros en 2015, y ahora estamos en 1.100 litros, casi como
diez años atrás. Por eso no hacíamos huelga en años anteriores y ahora sí”, dice López, quien vuelve a reiterar que el paro se debe estrictamente a una cuestión laboral y nada tiene que ver con la interna de Ctera. El de hoy será el decimosegundo
paro en Capital y el primero que se hace con los sindicatos divididos. Este año ya hubo siete paros en marzo, tres en abril y uno en julio. Recorridas de periodistas de Clarín mostraron que la adhesión fue muy dispar, que fue cayendo y resultó bastante baja en el último paro de julio.
El acuerdo entre el gobierno porteño y los 15 gremios docentes consistió en una recomposición salarial de 21,5% más adicionales no remunerativos que llevarán el aumento a 25%. Además el acuerdo contempla el compromiso del gobierno de volver a llamar a negociaciones en el mes de noviembre. López señala que el piso para la nueva negociación será del 21,5% y no 25% como lo muestra el gobierno. Y que a esta situación se llegó por la falta de una paritaria nacional, que hubiera colocado esos pisos más altos en todo el país.