Clarín

Analizan muestras de ADN para saber si Maldonado fue herido en una estancia

La Justicia quiere determinar si participó del ataque a un campo de Benetton 10 días antes de desaparece­r.

- BARILOCHE. ESPECIAL Claudio Andrade bariloche@clarin.com

La hipótesis sobre la posible participac­ión de Santiago Maldonado en el atentado incendiari­o a un puesto de la estancia El Maitén de la familia Benetton en Epuyén no fue descartada. Es por esto que en los próximos días serán cotejados los restos de sangre que dejó uno de los agresores aquella madrugada en el suelo de la propiedad y en la camisa del cuidador Evaristo Julián Jones (45), quien dice haber acuchillad­o a uno de los que irrumpiero­n en su hogar el 21 de julio pasado. No hay registro de que el herido haya sido atendido en ningún hospital público.

Si el ADN recuperado en Epuyén coincide con el de la madre y los hermanos de Maldonado, esto indicaría que el tatuador participó del ataque de Resistenci­a Ancestral Mapuche (RAM) aquel día.

La fecha de este atentado coincide con la última oportunida­d en que Maldonado utilizó su teléfono por lo que los investigad­ores especulan que el joven pudo haber resultado herido en esa oportunida­d.

Según esta teoría, Maldonado no habría estado en Cushamen el 1° de agosto, tal como denuncian los mapuches, que afirman que fue detenido y golpeado por Gendarmerí­a.

De acuerdo a la denuncia policial realizada por Jones, el 21 de julio a la 1.30 de la madrugada dos sujetos ingresaron a su propiedad por la fuerza y lo agredieron. El puestero intentó defenderse con un cuchillo logrando herir a uno.

“Entraron dos tipos juntos, encapuchad­os y con pequeñas luces que parecían linternas pequeñas. Yo me desesperé y ante la situación, agarré un cuchillo que estaba sobre la mesada y encaré a uno de los dos que entraron primero. Me atropellar­on sin decir palabra y entonces yo le tiré una puñalada a uno de ellos, para defenderme y estoy casi seguro de que lo lesioné”, detalló en su denuncia. “También veía que había gotas de

sangre en el piso, por eso creo que lesioné a uno de ellos”, agregó el trababjado­r al radicar la denuncia.

Los integrante­s del RAM le recriminar­on su acción, pero no lo castiga- ron especialme­nte por esto. Desde el suelo y con un arma pegada a su cabeza, Jones alcanzó a ver cómo caía la sangre.

Los investigad­ores viajaron en las últimas horas hacia Epuyén donde tomaron las muestras correspond­ientes. El siguiente paso es cotejarlas con el ADN de la madre de Maldonado, Estela Maris Pelosso, quien se hará la extracción de sangre entre hoy y el viernes.

“El sábado pasado se acordó que se tomarán durante esta semana las muestras de ADN a familiares de Santiago: a Estela, su mamá; a Enrique, su papá, y a Germán, su hermano. Sergio Maldonado ya aportó el material para la prueba genética el 14 de agosto en Bariloche. Intervendr­án en la toma de muestras el Equipo de Antropolog­ía Forense (EAAF), bajo instrucció­n del juez federal de Esquel, Guido Otranto, y el Juzgado Federal de Mercedes”, informó Andrea Antico, cuñada de Santiago.

De acuerdo a fuentes de la investigac­ión, una vez hecha la extracción a Pelosso, los resultados del cotejo de ADN podrían demorar alrededor de 10 días. Pero un experto consultado por

Clarín aclaró que, dadas las especiales circunstan­cias, los mejores laboratori­os del país hoy son capaces de elevar un informe en un plazo de 48 horas.

No es un detalle menor, deduce el facultativ­o, especialis­ta en casos forenses de alto perfil. “Hay mucho en juego aquí, si las muestras coinciden, muy probableme­nte lo sabremos cuanto antes”, señaló.

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Reclamo. En las últimas semanas hubo varias marchas por Maldonado.

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