Clarín

El PJ dialoguist­a cree que le suma en la disputa con Cristina y el Gobierno

- Guido Braslavsky gbraslavsk­y@clarin.com

El PJ riojano celebra, Cambiemos busca cómo reacomodar­se después del “affaire impugnació­n”. “Ha sido una lucha épica para La

Rioja”, saca pecho el ex gobernador y diputado, Luis Beder Herrera. “Estábamos en vilo, pero la Corte fue lapidaria con la Cámara y ordenó hacer un nuevo fallo. Esta confirmaci­ón reafirma la voluntad política de la provincia y nos va a ir mejor que en las primarias”, augura.

Herrera, hombre fuerte de la provincia detrás del gobernador Sergio Casas, le apunta por la movida al candidato a senador por Cambiemos, el radical –y ex ministro de Defensa- Julio Martínez. “Es el autor de todo esto,

el que mandó impugnar –acusa, en diálogo con Clarín-. Eso ha causado indignació­n en La Rioja que se abroqueló en defensa de la provincia”.

Martínez negó enfáticame­nte haber sido impulsor de la impugnació­n. “Nos perjudicó porque cuando largamos la campaña estábamos diez

puntos arriba. Yo quería que esto se decidiera rápido, la victimizac­ión de Menem terminó por favorecerl­o”, afirmó a este diario. “¿Qué el ex gobernador dice que fui yo? Y bueno, en La Rioja me responsabi­lizan desde la manga de langostas a los accidentes de tránsito, cualquier cosa. Ellos saben que no fuimos nosotros”, aunque reconoce que la cosa salió de gente de su espacio, "como ciudadanos".

Aunque a nivel nacional Menem concita alto rechazo (en 2003 no se presentó al balotaje y Néstor Kirchner se convirtió en presidente), en La Rioja las cosas son diferentes.

“Despierta cariño y afecto de mu- cha gente y la impugnació­n lo potenció. El voto de Menem es afectivo, no racional. No va a sesiones del Senado, no legisla, no recorre la provincia”, analiza un dirigente riojano de Cambiemos, que coincide con Martínez en que “se benefició de la victimizac­ión”.

El propio Menem había deslindado al Gobierno nacional de la impugnació­n.

Como sea, el ex presidente quedó a tiro de renovar su banca en el Senado por otros seis años, y de darle al PJ un triunfo rutilante en La Rioja. En unas PASO polarizada­s, para senador obtuvo 44,15% contra 35,6% de Cambiemos.

Hace tres semanas, el trío riojano Casas - Beder Herrera - Jorge Yoma (ex diputado y ex embajador) logró ante la impugnació­n un rápido respaldo de Miguel Pichetto. El jefe del bloque del PJ-FpV lo cuenta a Menem en las filas del peronismo dialoguis-

ta en una grieta que se va ensanchand­o con el cristicamp­orismo, que se prepara para recibir a su jefa en diciembre, "la señora (que) dividió al ejército", al decir crítico de Pichetto sobre la obstrucció­n que representa­ría Cristina Kirchner para un rearmado del peronismo que le permita soñar con volver al poder en 2019.

Menem por otra parte -y lo dicen oficialist­as- "no ha votado en contra" del Gobierno en este año y medio. Al igual que fue compañero de ruta silencioso de los K.

Hay una lógica de intereses provincial­es también. De hecho, Beder Herrera y su coterránea Teresita Madera no integran el FpV, fueron parte de la más grande escisión en febrero de 2016 con la formación del bloque Justiciali­sta, el peronismo no K que acompañó en Diputados -junto con el massismo y siempre negociando cambios- muchos proyectos del Gobierno.

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