Macri: “Si alguno no se preocupa por bajar el déficit, esto no va a andar”
Lo dijo días antes de dar a conocer las pautas del gasto 2018. Para los analistas es clave dar una señal en lo fiscal.
A pocos días de que se presente el presupuesto 2018 en el Congreso, Mau
ricio Macri fue tajante en relación a las metas fiscales. “Si alguno no se preocupa por bajar el déficit, esto no va a andar”, dijo ayer en un acto en la Casa Rosada, en un claro mensaje a
su propio gabinete. Es que algunos funcionarios no se sienten cómodos con el recorte en sus partidas presupuestarias. El Gobierno espera reducir el déficit fiscal primario a 3,2% del PBI en 2018 (de 4,2% este año).
Un grupo de economistas consultados por Clarín señaló que el Gobierno necesita achicar el rojo fiscal para ponerle un techo al endeudamiento. En ese camino, coinciden, el gradualismo de Macri se pondrá a prueba el año que viene.
“El gradualismo requiere un cumplimiento estricto de las metas, porque sino tenés que seguir aumentando el stock de deuda y la cuenta de intereses seguirá creciendo”, opinó Na
dín Argañaraz, titular del Instituto Argentino de Análisis Fiscal y hasta hace poco miembro del equipo eco
nómico de Hacienda. “Lo que va a pasar es que el Gobierno va a tener que tomar más deuda para financiar este déficit. Por eso si no bajamos el déficit primario, la cuenta de intereses de la deuda subirá y compensará el esfuerzo que se pueda hacer para achicar el gasto”.
Para Gabriel Caamaño Gomez, economista jefe de la consultora de Ledesma, “buena parte de lo que suceda con el déficit fiscal el año próximo dependerá de lo que el Gobierno haga en los últimos meses de este año con los subsidios al transporte que todavía no fueron tocados”. “Los subsidios al transporte representan la mitad del total de subsidios, es decir, casi un punto del PBI”, afirma el analista. “Si no los tocan antes de fin de año, deberán hacerlo en 2018 presionando aun más por el recorte del gasto”. Y alerta: “Endeudarse para financiar gasto corriente es una herramienta de corto o mediano plazo, de lo con- trario esto termina mal”.
“El gran desafío es 2018, porque sin ayuda del blanqueo de capitales, el Gobierno deberá achicar el déficit primario (aquel que no computa los intereses de la deuda) en 1,4 puntos del PBI”, explica Argañaraz. “Hasta ahora el esfuerzo fiscal fue menor, pasamos de 4,8% en 2016 a 4,2% de déficit en 2017, con un blanqueo de por medio que aportó 1,3% al PBI el año pasado y este año aportará 0,4% del PBI”.
Para el titular del IARAF, en los primeros siete meses del año el gasto primario aumentó en términos reales 2,2%, los ingresos totales aumentaron 3,2% y sin el blanqueo el déficit hubiera aumentado 15%, mientras que los intereses de la deuda aumentaron 41%. Sin embargo, el Presidente elogió ayer a Nicolás Dujovne por su manejo presupuestario. “Está muy
bien la labor que él hace”, dijo sobre su ministro.
Las palabras de Macri respaldaron a Dujovne en momentos en el que desde algunos sectores del Gobierno se cuestiona la rigidez del ministro en el trazado del Presupuesto 2018. Dentro de dos semanas se conocerá el proyecto.
Rodrigo Álvarez, titular de Analytica, advierte que “sin superávit en cuenta corriente la Argentina puede incurrir en un ciclo stop-go si los flujos de deuda externa se vieran interrumpidos”. Pero el economista defiende el ajuste gradual del gasto.”El gradualismo parece ser la única opción, máxime teniendo en cuenta que los niveles de deuda pública, tanto externa como en manos del sector privado, son bajos en términos históricos y compradas regionalmente”, opina Álvarez.