Cayó un cirujano que operaba a travestis para una red de trata
El silencio del residencial barrio santafesino Candioti Sur se interrumpió el lunes a la tarde, cuando se montó un operativo policial para detener al cirujano plástico Mario Carande (66), acusado de formar parte de una una red dedicada a la trata de personas y la venta de droga. La orden de detención la libró el juez Sebastián Casanello y fue ejecutada por la delegación local de la Federal. El caso, a medida que se conocieron detalles, sacudió a la opinión pública de la ciudad y generó un revuelo entre los vecinos del sospechoso.
Según informaron a Clarín fuentes de la investigación, Carande era parte de una banda que contaba con un mecanismo aceitado. “Reclutaban travestis del interior del país, las ope
raban en la clínica de Carande en Santa Fe, y luego las explotaban en Buenos Aires. De allí, algunos culminaban la cadena viajando a ciudades europeas, como Roma y París, siempre dependiendo de quiénes regenteaban el negocio”, explicó un vocero con acceso al expediente.
Otro de los allanamientos ordenados por el juez Casanello tuvo lugar en una clínica de calle Las Heras al 3400, también en la capital provincial. El centro médico pertenecería al sospechoso y sería el lugar donde se realizaban las cirugías investigadas. Allí la Policía secuestró elementos valiosos para la causa.
El fiscal Ramiro González, a cargo de esta investigación, apuntó contra el cirujano santafesino desde hace un año, con seguimientos y escuchas. Sin embargo, la Justicia viene tras los pasos de esta organización desde ha-
ce mucho más tiempo. “La lupa estaba puesta en viajes que eran realizados siempre a través de una misma
agencia”, señalaron fuentes judiciales. Pasado el mediodía de ayer, Mario Carande fue trasladado a Comodoro Py, donde hoy se le realizará la indagatoria.
Para la opinión pública santafesina el del cirujano, conocido en su ambiente, no es un apellido nuevo. El sospechoso es hermano de Sergio Carande, un comerciante que en junio de 2013 fue asesinado en el interior de su despensa, durante un intento de asalto.