Clarín

El gran golpe

El local dejó pasar la chance de quedar segundo y acercarse a Rusia. La visita pegó justo y está séptima, con el Repechaje a mano. El martes juegan Bolivia-Chile y Paraguay-Uruguay.

- SANTIAGO, CHILE. ESPECIAL

Conduce al conjunto guaraní que dio ayer la sorpresa en la fecha de las eliminator­ias sudamerica­nas al vencer 3 a 0 a Chile en Santiago. Parecía eliminado pero ahora da pelea para llegar a Rusia 2018.

Era un partido clave, no había margen para el error. Tropiezo enorme de Chile, que pone en riesgo su plaza para el Mundial. Enorme festejo de Pa- raguay, que goleó 3-0 y mantiene viva su esperanza de clasificac­ión.

Propuso Paraguay un comienzo a puro vértigo, decidido al ataque, con incursione­s continuas y generadas a partir del tándem conformado por Jorge Moreira y Oscar Romero por el flanco derecho. Las situacione­s no tardaron en llegar. Claudio Bravo estuvo rápido de reflejos para anticipar- se al ingreso decidido de Lucas Barrios; al toque, Jean Beausejour se interpuso y cortó el pase de Miguel Almirón que buscaba la concreción de Miguel Samudio y después el zurdazo frontal de Oscar Romero encontró el certero rechazo de Gary Medel.

Chile estaba desorienta­do. Le costó meterse en el partido y en la generación de juego exigió -no la tuvo- una mayor participac­ión de Arturo Vidal, el jugador que bien podía cambiar la ecuación. Tuvo una primera aproximaci­ón ofensiva, con una jugada de varias fases que se prolongó en la sutil descarga con el pie derecho de Alexis Sánchez (se quedará en Arsenal porque no se llegó a un acuerdo con Manchester City, que ofertó 50 millones de euros) y culminó con el inoportuno offside de Mauricio Isla.

Una burda infracción de Arturo Vidal a Jorge Moreira generó el tiro libre de Oscar Romero. El zurdazo del ex volante de Racing fue directo al corazón del área buscando la cabeza de un compañero. Empujándol­o, Vidal le ganó la posición a Gustavo Gómez pero en el envión quedó mal perfilado y de cara contra su propio arco conectó de lleno un frentazo para colocar la pelota al ángulo superior izquierdo, inatajable para Bravo.

Una ejecución de pelota parada muy precisa, la resolución de un gol en contra increíble e inesperado, que por un instante paralizó los corazones en el estadio Monumental.

Necesitaba imperiosam­ente Chile una reacción. La buscó, la generó y finalmente la tuvo en los últimos diez minutos de la etapa inicial. A partir de la circulació­n de pelota construyó lo mejor de su repertorio. Primero Gustavo Gómez despejó de cabeza un envío al área de Alexis Sánchez para Gary Medel; luego, el remate de Marcelo Díaz se fue por arriba del travesaño y, enseguida, el derechazo de Eduardo Vargas -bien perfilado- encontró la impecable respuesta del arquero Anthony Silva para despejar la pelota con ambos manos hacia su costado izquierdo.

Quebró Chile el juego por la derecha y ganó la pulseada en ese tramo. Solo le faltó la puntada final para resolver en la zona de definición. Hubo otra chance más: Paulo Da Silva rechazó por arriba del travesaño ante el ingreso de Nicolás Castillo por el envío de Jean Beausejour.

Acentuó su dominio el local en los primeros minutos del complement­o, fue en busca de ese gol que le era esquivo. Sin embargo, la espalda de Oscar Romero se interpuso en el lugar justo y en el momento indicado ante el fortísimo derechazo de Eduardo Vargas y Paraguay, así, consiguió respirar aliviado.

Enseguida, el gran golpe de nocaut. Víctor Cáceres, bien ubicado, encontró un rebote y de sobrepique metió un zurdazo cruzado ante la salida apresurada del arquero Bravo.

Chile acusó el impacto. Obligado,

fue por todo. Careció de profundida­d y lo que generó fue realmente poco. Apenas un derechazo de Alexis Sánchez se fue cerquita del palo derecho sobre los 13 minutos y el juez asisten- teea argentino Juan Pablo Belatti levantó su banderín y acertó al anular por offside el gol que ya celebraba Esteban Paredes a los 25.

Paraguay tampoco se quedó atrás. Mantuvo la calma, presionó cuanto pudo y cuando tuvo el resquicio, respondió golpe por golpe. Otro centro preciso de Oscar Romero (más allá de su espectacul­ar pegada tuvo un desempeño superlativ­o, siempre bien ubicado y decidido en la búsqueda de las acciones de ataque) al área chica y el cabezazo de Gustavo Gómez se fue cerca del palo derecho.

Chile no le encontraba la vuelta. El aliento de su gente dio paso al descontent­o, a la decepción, a la frustració­n. Los silbidos comenzaron a bajar de las tribunas, al tiempo que muchos espectador­es abandonaba­n sus lugares y emprendían la retirada.

Ya en el segundo minuto del tiempo adicionado por Néstor Pitana, un mortífero contraataq­ue que, a puro empuje y en velocidad, gestó Oscar Romero, se rubricó con el zurdazo letal de Richard Ortiz para anotar el tercer gol y liquidar la historia.

En el formato de Eliminator­ias, Paraguay celebró por tercera vez una victoria en suelo chileno, La primera fue 1-0 rumbo a Alemania 2006, la segunda por 3-0 en el camino a Sudáfrica 2010, resultado que anoche repitió para mantener intacto su sueño de arremeter en las tres fec has finales y llegar a Rusia.

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EFE El tiro del final. Richard Ortiz grita su gol, el tercero de Paraguay, tras rubricar un muy buen contraataq­ue visitante ya en el descuento. El que lo sufre es el chileno Gary Medel.
 ??  ?? Francisco “Chiqui” Arce Técnico de Paraguay.
Francisco “Chiqui” Arce Técnico de Paraguay.

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