Demostración de fuerza militar de EE.UU. frente a Corea del Norte
Con bombarderos pesados y cazas furtivos, fuerzas de Estados Unidos participaron ayer de un ejercicio con municiones reales en Corea del Sur. Fue una contundente demostración de fuerza frente a Norcorea, tras el lanzamiento del misil de alcance medio por encima de Japón.
“Los ejércitos del aire surcoreano y estadounidense efectuaron un ejercicio de prohibición del espacio aéreo destinado a enfrentar de forma implacable los disparos repetidos de misiles balísticos por parte de Corea del Norte y el desarrollo de sus armas nucleares”, señaló la Fuerza Aérea surcoreana en un comunicado.
Dos bombarderos poderosos B-1B del territorio estadounidense de la isla de Guam, en el Pacífico, y dos mo- dernos cazas furtivos F-35B de los marines de la base de Iwakuni, en Japón, participaron en el ejercicio, junto a cuatro cazas surcoreanos.
Las maniobras se llevaron a cabo en la provincia de Gangwon, a sólo 150 km al sur de la zona desmilitarizada en la frontera entre las dos Coreas. Corea del Norte detesta estos despliegues de fuerza estadounidenses cerca de su territorio, y probable- mente responderá con furia.
El comando estadounidense del Pacífico confirmó que los ejercicios fueron una respuesta directa a la amenaza de Norcorea. A lo largo de 10 horas, los bombarderos y cazas sobrevolaron las aguas cerca de Kyushu, Japón. Los aviones cruzaron la península coreana y atacaron blancos simulados con munición de guerra para luego regresar a sus bases.
El régimen norcoreano, que acusa a Washington de amenazarlo al hacer alarde de su arsenal nuclear, dice que el B-1B de largo alcance es un “bombardero estratégico nuclear”, aunque no están provistos de armamento nuclear. Se da por sentado que Pyongyang reaccionará enérgicamente.
Los despliegues de poderío militar generan el riesgo de que la situación empeore a medida que cada bando trata de demostrar que no se dejará intimidar. Corea del Norte ha dicho claramente que su programa armamentista, que requiere ensayos constantes para su perfeccionamiento, es la única manera de enfrentar la hostilidad de Washington, en alusión a la gran presencia militar de EE.UU. en Corea del Sur, Japón y el Pacífico.
Por su parte, al realizar los ejercicios con Seúl, Washington busca demostrar que no permite cuestionamientos a su supremacía en la región. Los ensayos, los vuelos y los tres ejércitos que se observan furiosos por encima de la frontera más militarizada del mundo generan la posibilidad de que un error de cálculo provoque enfrentamientos reales.