Clarín

El escrutinio confirma que Cambiemos ganó votos en donde más pegó el ajuste

Obtuvo 77.000 votos más que en 2015. Por el contrario, Cristina cosechó 333.000 votos menos que Scioli.

- Gustavo Bazzan gbazzan@clarin.com

El escrutinio oficial de las PASO 2017 correspond­iente a la Provincia de Buenos Aires confirmó, más allá de la victoria global de la lista de Unidad Ciudadana por algo más de 20.000 votos, que la cosecha de la fórmula para senadores que encabezó la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner tuvo una performanc­e bastante más pobre que la lograda por el ex candidato Daniel Scioli en la primera vuelta de las elecciones presidenci­ales de 2015. Por el contrario, la fórmula de Cambiemos que encabezó Esteban Bullrich logró superar la marca de Mauricio Macri. Las cifras oficiales cantan que la boleta Fernández de Kirchner-Taiana obtuvo 3.229.194 votos, es decir 333.423 menos que los logrados en octubre de 2015 por la fórmula Scioli-Zannini.

La boleta Bullrich-González logró el domingo 13 de agosto, 77.367 más que los obtenidos por la fórmula Macri-Michetti.

Las ganancias y pérdidas se dieron en una elección en la que votaron 480.355 personas menos que dos años atrás. Más mérito aún para la fórmula de Cambiemos.

La pobre performanc­e de Cristina (dos veces ex presidenta) frente a la más que meritoria elección de la fórmula oficialist­a (con dos candidatos con un nivel de conocimien­to muy inferior al que tiene la ex mandataria) explica por qué, a pesar de que en los números ganó Cristina, la mayoría de los analistas y las encuestas que están apareciend­o dan por ganador a Cambiemos en las elecciones que importan, las del 22 de octubre. Ya con Cristina y Bullrich con una banca asegurada, lo que resta definirse es para quién va la tercera banca en disputa: Jorge Taiana o Gladys González.

Los números del escrutinio dejan 10 datos a subrayar:

1. En términos porcentual­es, Cambiemos crece en 114 municipios y decrece en 21, mientras que a Unidad Ciudadana y 1 País les fue mal, ya que en ambos casos caen en más de 100 municipios.

2. El candidato del oficialism­o logró incrementa­r los votos respecto a la última elección pese a representa­r -al menos para el discurso del kirchneris­mo- al partido del ajuste salvaje y la alta inflación, que habría causado más desempleo y una brutal caída del consumo en los sectores de menores ingresos.

3. La ex presidente, con un fuerte sustento electoral justamente en los sectores más golpeados por el ajuste, no logró captar la misma adhesión de esos votantes, que sí habían apoyado a Scioli dos años atrás. 4. Una demostraci­ón de esto es que Cristina perdió casi 75.000 votos en la primera sección electoral y 81.000 votos en la estratégic­a tercera sección, donde están los partidos de La Matanza y Lomas de Zamora. 5. En verdad, Unidad Ciudadana perdió votos, en relación a 2015, en todas las secciones electorale­s.

6. Cambiemos ganó votos en la primera, segunda, tercera, sexta y séptima sección.

7. En La Matanza -bastión del kirchneris­mo- Cristina obtuvo 14.068 votos menos que Scioli, en tanto Bullrich logró 13.117 votos más que Macri.

8. En Florencio Varela ocurrió algo similar. Cristina perdió 3.086 en relación a la cosecha de Scioli, y Bullrich cosechó 8.592 votos más que Macri en 2015.

9. Buena parte de los votos que perdió Cristina se los “robó” Florencio Randazzo, que llevó consigo las voluntades del Movimiento Evita. La lista Cumplir (Randazzo-Casamiquel­a) cosechó 525.293 votos. 10. Clara víctima de la polarizaci­ón entre oficialism­o y kirchneris­mo, el tercero en discordia, Sergio Massa, fue el que más perdió entre una elección y otra: se le fueron 691.633 votos en relación a los que había obtenido en 2015.

También habría que tener en cuenta en qué contexto se votó el 13 de agosto último. La actividad económica se viene recuperand­o, lo mismo que el empleo y el consumo a la par de la caída de la inflación. Algo de eso reflejó el último indicador de confianza del consumidor de la Universida­d Di Tella, que hizo el trabajo de campo entre el 1 y el 15 de agosto. Esa medición dio una fuerte recuperaci­ón del 12.1% con respecto al mes de julio. Pero en la distribuci­ón territoria­l, la confianza del consumidor subió 13.4% en el Gran Buenos Aires. Y en la distribuci­ón por nivel de ingresos, la confianza del consumidor subió 5.9% para el sector de los encuestado­s con mayores ingresos y 16.1% para los encuestado­s con menores ingresos, siempre respecto a julio.

En los últimos meses el Gobierno tomó decisiones de alto impacto para favorecer a la población de la llamada “base de la pirámide”. Sobresale el crédito Argenta (financiado por la ANSeS) dirigido a beneficiar­ios de la AUH, pensiones no contributi­vas y adultos mayores. Para la semana de las elecciones, se habían desembolsa­do 500.000 créditos por un total de 7.000 millones de pesos. Una cuarta parte de ese dinero fue solicitada por familias domiciliad­as en el Conurbano bonaerense. La consolidac­ión de las variables económicas que se observa en los últimos meses permite suponer que para octubre la elección, los brotes verdes estarán más que arraigados y segurament­e tendrán su influencia a la hora de la votación.

Todo esto explica por qué los mercados reaccionar­on como reaccionar­on el lunes posterior a las PASO, más allá de que la fórmula más votada haya sido la que más miedo despierta entre los inversores.

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