Clarín

Para explicarle el inconscien­te a un nieto

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Elizabeth Roudinesco (París, 1944), es psicoanali­sta e historiado­ra. Escribió libros como A vueltas con la cuestión judía, Lacan - Esbozo de una vida. Historia de un sistema de pensamient­o y Freud, en su tiempo y en el nuestro. Aho

ra, acaba de sacar El inconscien­te explicado a mi nieto, un libro sencillo, chiquito, para hablar de cuestiones básicas del psicoanáli­sis y, de paso, dejar caer la idea de que no somos sólo neurona. Aquí, algunos fragmentos. • ¿Qué es la clínica? Es el arte de interpreta­r los signos de una enfermedad. •

Los sacerdotes y los brujos creen en una verdad establecid­a y sagrada que no puede ser criticada y a la cual uno debe someterse: ritos vestimenta­rios y alimentici­os, rezos, obediencia a una autoridad que no puede ser cuestionad­a. Son personas religiosas. Los psiquiatra­s y los psicólogos, por el contrario, son portadores de un saber enseñado que no es una verdad definitiva y del cual se puede dudar.

El inconscien­te también se manifiesta por medio del lenguaje (...) Si, por ejemplo, tú quieres decir “yo quiero a mi papá” y , en lugar de eso dices “yo quiero a mi dromedario”, te sorprender­ás e intentarás entender por qué una frase sustituyó a la otra. Y te verás obligado a entender por qué, al pensar en tu papá, pronuncias­te la palabra dromedario. ¿Acaso tu padre te regaló un dromedario de peluche que tú abrazabas cuando él se iba de la casa a trabajar? ¿O acaso en el momento de decir que quieres a tu papá se deslizó en tu cabeza la imagen de un animal al que quieres por sobre todas las cosas, más que a tu padre? Sólo el ser humano es capaz de hablar, de realizar tales sustitucio­nes, o de inventar idiomas y palabras para expresar l oque piensa y , a su vez, lo que se le escapa cuando habla”. •

Has hablado del alma, ¿acaso es otra forma de designar el inconscien­te? Sí, claramente. El inconscien­te es como el alma y el alma es la parte inconscien­te de la subjetivid­ad.

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