Argentina e Israel, hoy más cerca
La visita del primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu a la Argentina, tuvo características his
tóricas no sólo porque es la primera vez que un premier israelí viene a nuestro país, sino también por las extraordinarias posibilidades que el fortalecimiento de estos vínculos genera para ambas naciones. Argentina e Israel están unidos por una
vocación de libertad. Israel es la única democracia en Medio Oriente y la Argentina ha sido históricamente un faro que guió el avance de la democracia, los derechos humanos y la libertad en toda la región latinoamericana.
La comunidad judía tuvo un maravilloso desarrollo en este bendito país. Fue conformada por grupos de inmigrantes que comenzaron a llegar desde países diversos, escapando de las guerras y el hambre, sin idioma y sin recursos, que lograron en base a esfuerzo y sacrificio, salir adelante y crecer en paz. Los judíos, como todas las colectividades que
fueron arribando, sin abandonar sus rasgos particulares, hicieron su aporte a la construcción de una sociedad que es también un ejemplo de convivencia y respeto por la diversidad.
Netanyahu es el jefe de estado con raíces en una tradición milenaria y con una visión de futuro extraordinaria. Un país muy pequeño en metros cuadrados y en población, pero gigante en sus estándares morales. Un sistema de gobierno basado en leyes y normas éticas estrictas, que se aplican incluso para
la autodefensa contra los ataques de un enemigo que profesa un odio atávico y vesánico. Un país en el cual los tribunales de Justicia y los sistemas de seguridad están a la vanguardia en lo que hace al respeto de los derechos fundamentales de todas las personas.
Tenemos mucho que aprender en esa materia: llevamos 23 y 25 años desde los dos hechos terroristas que golpearon la Argentina y que permanecen impunes. Sabemos quié-
nes fueron los responsables y debemos agradecer la cooperación de Israel, EE.UU. y de algunos gobiernos europeos por estar siempre presentes para denunciar a quie
nes apoyan y financian el terrorismo. Que el Gobierno nacional haya decidido firmar acuerdos de cooperación en diferentes áreas de interés complementario es sin dudas una señal muy positiva. Es la confirmación de que se está transitando el camino correcto en la construcción de alianzas con países con quienes compartimos valores y principios. Esperamos que este sea el rumbo que tome toda la región.
El mundo enfrenta hoy enormes desafíos de seguridad, innovación y desarrollo, temas en los cuales sin dudas Israel puede convertirse en un socio estratégico. Desde la comunidad judía argentina celebramos con orgullo esta visita con la convicción de que sin dudas posibilitará seguir construyendo un futuro mejor para todos.