El testigo K que estuvo en el corte dijo que no declaró porque el juez no lo citó
Participó del operativo del 1 de agosto en Cushamen y lo filmó. Aún no dio su testimonio.
Habló el misterioso testigo K que estuvo presente en buena parte de los acontecimientos más importantes que ocurrieron el 1 de agosto en el Lof de Cushamen. Allí donde la Justicia buscó ayer rastros de Santiago Maldonado. El testigo se llama Eduardo
Pastorini. Clarín difundió el domingo que este sindicalista, maestro de una escuela vinculada a las Madres de Plaza de Mayo, que marchó junto a la CTA y La Cámpora en Bariloche pidiendo, entre otras cosas, la liberación de Milagro Sala, llegó a Cushamen, encapuchado, primero para for
mar parte del corte de la ruta 40 el 31 de julio, que terminó un día después siendo despejado por la Gendarmería, que casi de inmediato entró al predio que habitan los mapuches radicalizados identificados con la RAM. Después de eso, Pastorini estuvo en varios de los acontecimientos centrales que ocurrieron allí, pero silente, e intentando no llamar la atención de nadie. Según consignó el Defensor Oficial de Chubut, el mismo 1 de agosto a las 19:15 fueron los mapuches que Pastorini conoce los primeros en denunciar que de ese lugar la Gendarmería se había llevado detenido a Maldonado. Desde ese día no se supo más de él.
Hasta ahora. El domingo, Pastorini dijo en declaraciones radiales difundidas por el diario de Río Negro, que lo que decía el artículo de Clarín sobre él eran “todas mentiras”. Después dio su versión de los hechos especificando que la “única verdad es esta”: “Yo estuve el 1 de agosto en el Lof a
partir de las 13:30. Acompañé a unas compañeras de la comunidad porque en ese momento la noticia era que Gendarmería había entrado a la comunidad”. Además, informó que “en ese momento no sabían nada de que había una persona desaparecida”. Y aclaró que “yo nunca conocí a Santiago [por Maldonado]”.
El artículo de este diario consignó que Pastorini, a pesar de haber estado en el Lof el 1 de agosto, nunca había declarado porque el juez del caso, Guido Otranto, aun no lo había convocado, algo que confirmó
En un texto que escribió en primera persona y viralizó por las redes, Pastorini redactó que se vio “forzado a rebatir públicamente las mentiras de los medios masivos de comunica- ción, que se valen de mi persona en una más de sus delirantes maniobras, distrayendo la atención del hecho público y notorio que es la desaparición forzada de Santiago Maldonado en el marco de la represión ocurrida en el Lof de Cushamen el 1 de agosto”.
Su versión es que llegó ese día, y no que estuvo en el piquete que empezó el 31 de julio. En la filmación, los investigadores del caso lo identifican por su ropa como uno de los encapuchados que llega al corte de la ruta y se abraza con el resto de los manifestantes. Pastorini asegura que llegó al lugar después de escuchar en una radio que se solicitaba ayuda a quienes tuvieran vehículos para que se acerquen al lugar.
Pastorini, que más allá de lo que él considere sí es un testigo clave porque filmó, grabó y se quedó hasta que la Gendarmería se fue, afirmó en uno de los párrafos de su escrito que llevó al Lof “a unos familiares de la co
munidad (a quienes conocí ese mismo día cuando acudí al llamado)”.
En radio, esa versión fue narrada de modo diferente por él mismo: dijo que fue porque acompañó a “unas compañeras de la comunidad”. Pastorini escribió que su silencio es “mediático. Y que no equivale a callar, señores periodistas. Yo no callo: desde el primero de agosto marcho junto a la comunidad de El Bolsón para reclamar por la aparición con vida de Santiago Maldonado”.
Dice que ni Clarín ni La Nación
“pueden saberlo”, ya que “nunca se tomaron el trabajo de venir a hacer una tarea de investigación auténtica en el lugar de los hechos”.
El diario Clarín, Canal 13 y el canal de noticias TN informan sobre el caso Maldonado desde que se hizo público con enviados especiales al lugar de los hechos. Pastorini escribió que responsabilizaba a los medios de comunicación "que expusieron mi imagen, y a cada uno de los periodistas que a través de su acciones irresponsables me sitúan en una posición de vulnerabilidad y riesgo”. Clarín tiene en su poder un video donde se ve a Pastorini filmar a los gendarmes que se retiran del Lof el 1 de agosto en un camión. El resto de las imágenes y su nombre surgen de
la investigación judicial y de grabaciones que le tomó la Gendarmería, e incluso habitantes del Lof.
Como decía la nota de Clarín, se repite, el juez Otranto no lo citó a declarar. Pero sí hizo un llamado a quie
nes pudieran haber visto algo en el Lof para que se presenten en su juzgado de Esquel, prometiéndoles protección y discreción si es que necesitaban esas garantías.
Pastorini tendrá sus razones para no haberse presentado espontáneamente donde se instruye el caso.
Clarín ratifica lo publicado: según los investigadores, y un informe que forma parte del expediente, él estuvo en varios de los acontecimientos que ocurrieron en Cushamen, incluido el corte de ruta del 31 de julio.
Si eso es falso, el mejor modo para defenderse es presentando pruebas en la Justicia, no en Facebook. Aunque quizá Pastorini tenga sus motivos y sus creencias sobre por qué descree o no le es conveniente acercarse a aclarar su situación en los tribunales.
La organización sindical CTA, de la que forma parte el sindicato de judiciales de Río Negro en el que Pastorini es delegado en Bariloche, el SITRAJUD, emitió un comunicado sobre el caso del testigo K. Ese texto es más cuidadoso en la defensa del militante kirchnerista que la que el propio Pastorini hizo. Expresa preocupación por lo que consideran que fue una actitud irresponsable de la prensa, un “hostigamiento”. En ninguna parte de ese comunicado sindical,
sin embargo, se desmiente que Pastorini haya estado en el corte de la ruta 40.