Lo bueno de no respetar barreras
Una de cada tres mujeres sufrirá algún tipo de violencia física o sexual a lo largo de sus vidas.
¿Cuánto les debemos a esas personas que se animaron a quebrar una regla, a traspasar un límite que se imponía como la frontera de lo posible, de lo imaginable? Aquellas personas que desafían lo “establecido” nos regalan un mundo más amplio, más grande. Mariela Santamaría es capitana de la Fuerza Aérea y es la única mujer en comandar un avión Hércules. No se hizo eco de las ba
rreras que se le presentaron y logró convertirse en la única que realizó vuelos entre las bases argentinas en la Antártida. Las definiciones cerradas nos encorsetan, aplacan la creatividad y nos alejan de nosotros mismos y de los demás.
Un estudio de Adecco Argentina ahondó en las limitaciones de aquello que nos “permitimos” imaginar: se les preguntó a 5.369 personas si consideraban que determinadas tareas eran más “adecuadas” para que las realizaran hombres, mujeres o si era indistinto el género para llevarlas a cabo. Mientras la opción “indistinto” acumuló entre un 70 y 85% en varias de las opciones propuestas (por ejemplo, programación informática o dirigir una empresa), ciertas actividades fueron entendidas en gran medida como “masculinas”, entre ellas, construir una casa, arreglar un auto, arbitrar un partido de fútbol o pilotear un avión, como lo hace Mariela. ¿Cuán posible resultará, entonces, que una apasionada del fútbol dirija un River-Boca?
Hay personas que, aunque la historia o las estadísticas no las acompañaban al tomar decisiones y armar su carrera, tomaron el rumbo
más sinuoso. Y se animaron a marcar camino, a escribir una historia diferente para cambiar su realidad y, sobre todo, la de su entorno.
Una de ellas es la pediatra y especialista en hemoterapia Silvina Kuperman, directora del Banco de Sangre de Cordón Umbilical y jefa del Centro Regional de Hemoterapia del Garrahan. Junto a su equipo, decidió llevar adelante un cambio radical no solo para mejorar el servicio a los pacientes, sino para aliviar la preocupación de aquellos que debían “juntar” donantes. Así, hace seis años el hospital se convirtió en el único del país con sangre 100% “voluntaria”, lo que bajó 10 veces las infecciones transmisibles por transfusión. El martes pasado estuvo en la reunión anual de Voces Vitales –una fundación que promueve el liderazgo femenino- para contar el trabajo que realizan con la donación del cordón umbilical.
Otra “voz vital” que llegó de India para contar su manera de ir por más fue Elsa Marie D’Silva, quien empezó a trabajar en una empresa aeronáutica como azafata y, con un máster de por medio, llegó a ser vicepresidenta de la compañía. Pero la violación colectiva y el asesinato de una joven de 23 años en un ómnibus en Nueva Delhi en 2012 la conmocionó de tal manera que buscó alternativas para -otra vez- transformar su entorno. Creó Safecity, una plataforma que recopila y mapea casos de violencia sexual callejera a través de testimonios anónimos. “Así como usás otros sitios colaborativos como Tripadvisor -que te dicen lugares recomendados-, Safecity sirve para que puedas tomar mejores decisiones con más información: te puede ayudar a elegir, por ejemplo, qué medio de transporte tomar. Pero, claro, quedarse en casa nunca puede ser una opción”, dijo.
Según datos de la ONU, al menos una de cada tres mujeres sufrirá algún tipo de violencia física o sexual a lo largo de sus vidas. “Ese número es aun mucho mayor en India. Además, uno de los principales problemas en mi país es que, por una cuestión cultural, las mujeres no comparten sus historias de violencia sexual para no ser humilladas”, explicó la activista a Clarín. Con esta plataforma colaborativa busca acortar la brecha entre las estadísticas y la cantidad real de acosos, así como detectar patrones de conducta a través del análisis de los datos. ¿Su objetivo final? Encontrar mejores soluciones a nivel local: el incremento del alumbrado público, la disposición de baños seguros o la modificación de las rondas policiales son algunos de los cambios que se generaron en distintas comunidades. Acaban de lanzar una aplicación en Android e iOS: tiene opción en español y generaron un acuerdo con la fundación argentino-holandesa El Desafío para hacer una prueba piloto en nuestro país, en Rosario.
El sábado 23 celebramos que las argentinas podamos ejercer el derecho al sufragio: ese día, hace 70 años Eva Perón hacía el anuncio de la ley de voto femenino. Antes que ella, la socialista Alicia Moreau de Justo y la italiana Julieta Lanteri -la primera mujer que votó en nuestro país- ayudaron a marcar un camino. De todos depende que no tengan que pasar décadas para que deje de resultar extraña una chica engrasándose para arreglar un motor.