Reacción de cadenas comerciales y marcas frente a la caída del consumo

Durante el mes de julio, el consumo en supermercados y shoppings cayó

2,1%, respecto del mismo mes del año pasado, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Se trata de la cuarta disminución con

secutiva, desde que en abril, el organismo repuso esta medición incluyendo las ventas en cantidades.

Según, estos datos oficiales, la facturación de las grandes cadenas, ascendió a $ 29.749,1 millones, lo que im-

plica una mejora de 18,4% pero al mismo tiempo refleja una caída importante, en el volumen vendido.

En los supermercados la baja más pronunciada se dio en frutas y ver

duras (-12% interanual), mientras que en los shoppings las ventas más afectadas fueron las de electrónicos y electrodomésticos (-13% ia). En ambos tipos de comercios, las ventas de indumentaria y textiles sigue exhibiendo un marcado descenso (-6% ia y -9% ia respectivamente).

En los shoppings, según el INDEC, las ventas a precios corrientes llega-

ron a $ 5.916,4 millones un 14,7% más que hace un año atrás, pero 2,1% menos en unidades. La situación en los centros de compra está llevando a los comercios a impulsar distinto tipo de promociones e incentivos. Como los sistemas de puntos para canjear por regalos o prendas de la marca, como implementó Cheeky, por ejemplo. O la realización de eventos de ex

periencias para clientas dónde se las sorprende con regalos y oportunidades de conocer a las caras famosas de la marca, tragos o comidas, como es el caso de Desiderata, la marca de ropa femnina.

Los supermercados también redoblaron acciones de descuentos con tarjetas para retener clientes que migran hacia los autoservicios mayoristas, en busca de mejores precios.

Lucía Pezzarini, economista de LCG, precisamente analiza que existe “una mejor performance del con- sumo en otros indicadores alternativos, que tienen en cuenta, por ejemplo, las ventas en el segmento mayorista, almacenes y comercio electrónico, no contempladas en la encuesta del INDEC”, señaló. También, la recaudación por IVA, que creció 12% interanual real en agosto o el consumo con tarjeta de crédito que tímidamente comenzó a repuntar. “En el último trimestre tuvieron una suba real del 1,3% anual, mientras que los créditos personales mantienen un crecimiento muy elevado (+26,6% ia)”, detalló.

Según su visión, “algunos indicadores muestran que es factible esperar una mayor recuperación del consumo para los próximos meses: en junio, los salarios de los trabajadores registrados reflejaron una recomposición real del 5%, mientras las prestaciones de ANSES tendrán un incremento del 13% en septiembre, que implica una mejora real del 4%”.