Andrada: “Todos nos daban por muertos, pero acá estamos”
El arquero, cerca del final del partido, le tapó una gran pelota a Botta y en la definición atajó dos penales.
Jorge Almirón y Lanús todo lo pueden. O al menos esa es la sensación. Anoche, el Granate volvió a hacer historia y ante un grande como San Lorenzo: lo eliminó por penales y avanzó por primera vez a las semifinales de la Copa Libertadores. “Todos nos daban por muertos y sin embargo acá estamos”, se despachó el arquero y figura, Esteban Andrada.
“Este equipo en la última década ganó todo lo que jugó. Siempre da batalla”, agregó Andrada lleno de emoción. No le faltaba razón al arquero. Desde que Almirón se hizo cargo del equipo, Lanús es una máquina de ganar. Y lo hace jugando bien. El año pasado se la pasó de fiesta: se coronó en el torneo local, se quedó con la Copa Bicentenario ante Racing y goleó de manera categórica a River en la Supercopa Argentina. “Salimos con todo porque sabíamos que teníamos que hacer un gol rápido para no entrar en la desesperación. Por suerte igualamos la serie en los primeros 20 minutos. En el segundo tiempo nos cansamos y San Lorenzo manejó la pelota y generó situaciones”, analizó el ídolo Lautaro Acosta. Y cerró con tranquilidad: “Ahora nos toca River que viene de hacer 8 goles. No será sencillo. Pero primero tenemos que pensar en el campeonato local”.
“Es una alegría enorme. Logramos algo histórico, pero tenemos que seguir. Se viene una semifinal contra River que será hermosa para jugar”, afirmó Andrada, el héroe de la noche: le atajó los penales a Matías Caruzzo y a Nicolás Blandi. “Monetti me alcanzó el papelito donde teníamos anotados los pateadores de San Lorenzo: los habíamos estudiado en la concentración el día anterior. Con el
Mono tenemos una linda relación y nos apoyamos mutuamente”.
Todo fue felicidad para Lanús. Los abrazos se multiplicaron, los cánticos se sucedieron. No era para menos: el equipo, este equipo, sigue escribiendo la página más gloriosa de la historia del club. “A este equipo nadie lo tiene que dar por muerto. Demostramos que seguimos estando preparados para dar pelea”, finalizó con euforia el capitán Maximiliano Velázquez.