La intimidad de dos leyendas
PETE TOWNSHEND Y CHARLY GARCÍA
El líder de The Who recibió al ídolo local antes de tocar por primera vez en la Argentina.
Primer acto: Charly García va a ver a los Who, banda que siempre ha estado entre sus citadas influencias. Segundo acto: a Charly le gustaría conocerlos. Tercer acto: toc toc, se abre una puerta y ahí están Pete Townshend y Roger Daltrey, guitarra y voz cantante del mítico grupo, saludando a García. ¿Cómo se llama la obra? Soy tu fan.
La cosa fue así: a través de uno de los organizadores se hizo una gestión y Charly -que llegó a La Plata acompañado por su socio, el Zorrito von Quintiero- quedó a la expectativa en un camarín, a la espera del gran mo- mento. Y cerca de las 19.30, se producía la reunión cumbre. Luego se supo: no sólo Charly los admira a ellos, sino que ambos músicos británicos estaban al tanto de lo que él significa para el rock en castellano. De ahí en más, una charla amigable, guiños, complicidad, buena onda... Y la excitación impregnando esas cuatro paredes. De hecho, ¡Daltrey no podía contener su efusividad!
No había tiempo para mucho más: a las 20, los Who tenían que salir a escena. Pero antes de la retirada, Charly cumplió el rito de cualquier fan: marcador grueso en mano, les pidió que le autografiaran su último disco, Random. Y allí quedó, grafiteado para siempre, el afecto y el respeto mutuo del encuentro.
Afuera, el Único se fue llenando a medida que la noche se cerraba: la lluvia insistía con quedarse en La Plata y de a ratos perdonaba a los que quedaban más expuestos en el círculo central. A la hora del recuento -todo hay que decirlo-, hubo clara mayoría Guns, por supuesto. Después de todo, Axl, Slash y sus muchachos ya son parte de la familia entre nosotros.
Lo mejor estaba por comenzar. Desde un palco, Charly se veía feliz. ■