La NFL ya sugiere que los jugadores no deberían arrodillarse durante el Himno
Es el puntapié inicial de la liga de fútbol americano para decidir la obligatoriedad de esa postura.
La conducción de la liga de fútbol americano marcó la cancha en cuando a la polémica en torno a las quejas de los jugadores, en forma de rodilla al suelo durante el Himno, por las injusticias sociales. A través de un comunicado, la NFL les sugiere perma- necer de pie durante la canción patria, con la certeza casi unánime entre quienes conocen la interna dirigencial de que es el paso anterior a reglamentar la obligatoriedad de pararse al sonar el Himno.
El vuelco de la NFL no conoce de medias tintas. Por caso, Jerry Jones, dueño de Dallas Cowboys, pasó de arrodillarse con sus jugadores antes de un partido a asegurar que “nadie que se arrodille jugará en este equipo”. Y después de haber defendido a los jugadores tras los insultos del presidente Donald Trump, el comisionado de la liga, Roger Goodell, firmó una circular enviada a todas las franquicias con dos asuntos: “Reunión de otoño / Himno Nacional”.
En cinco párrafos, deja entrever - aunque lo ponga en palabras dulcesque la cúpula dirigencial no quiere más jugadores protestando: “La actual disputa por el Himno está amenazando con erosionar el poder de unidad de nuestro juego y nos está dividiendo. (...) Como muchos de nuestros fans, creemos que todos deberían estar de pie durante el Himno. (...) También nos preocupamos mucho por nuestros jugadores y respetamos sus opiniones y preocupa- ciones sobre los asuntos sociales críticos. La controversia sobre el Himno es una barrera para tener conversaciones honestas y lograr un progreso real en estos asuntos subyacentes. Necesitamos dejar atrás esta controversia y queremos hacerlo junto a nuestros jugadores”.
Hasta ahora, el reglamento de la NFL no incluye al Himno en el apartado de los códigos de conducta para jugadores y entrenadores. Sí en un manual de operaciones (un documento más orientado a las organizaciones que a los jugadores) resalta que “durante el Himno, deberían es- tar de pie”.
Muchos ponen la lupa en los derechos legales de los jugadores y su amparo en la Primera Enmienda, que protege el derecho a la protesta. En los estadios, los jugadores están en la condición de empleados privados de una compañía (la NFL), por lo que la protección de la Primera Enmienda no los alcanzaría. Ahí entra a tallar lo que cada jugador tenga firmado en su contrato y lo que cada franquicia considere un motivo de despido. Es improbable, en este marco, que algún futbolista sea despedido por protestar. Incluso, una situación semejante sólo avivaría el fuego.
“Era hora de que Roger Goodell finalmente exigiera a los jugadores ponerse de pie para nuestro gran Himno. Respeten al país”, escribió Trump en Twitter. Pero la Liga estuvo rápida para alejarse de esos dichos y alivianó todo.
Con mayor o menor énfasis, con alto perfil o bajando los decibeles, lo cierto que es todo conduce a una resolución que, parece, no será la más feliz para los protestantes. w