Clarín

El suspenso que viene del frío

La intriga está puesta en primer plano. Una novela de crímenes que atrapa y entretiene.

- Pablo O. Scholz

En la senda de las novelas de crímenes, más que de thrillers, “El muñeco de nieve” tiene los suficiente­s elementos bien balanceado­s para entretener, y luego, intrigar. Mucho tiene que ver con esto último que el director es Tomas Alfredson. Si la trama de la novela de Jo Nesbo en que se basa es de todo menos lineal, el realizador de “El Topo” se siente a sus anchas. Ya al adaptar aquel best seller de John le Carré, en que todo era enrevesado, el director de “Criatura de la noche” no hacía una concesión: el espectador que no estaba atento, podía perderse. Lo mismo sucede con “El muñeco de nieve”, vendida como una película de terror, pero no lo es. Jugando con la ambigüedad y ambivalenc­ias, arranca con un suicidio. Estamos en una zona con frío polar, mucha nieve y lagos congelados, y una mujer le dice a un hombre al que llaman “Tío”, luego de sufrir una golpiza, tener relaciones y ser vista por su hijo, que le contará a la familia que al pequeño lo tuvo con él. Alfredson no se preocupa por aclarar nada: Harry Hole (Fassbender) se despierta a la intemperie en una zona helada de Oslo. Ha muerto su tío (!), pero lo importante es que él es un detective de elite y que con la ayuda de otra policía (Ferguson) irá tras las pistas de varios crímenes perpetrado­s hace años, en los que las víctimas son mujeres, que engañan o no a sus parejas, que por lo general tienen hijos. Hole recibe un anónimo con un dibujo del muñeco de nieve, como avisándole que habrá un nuevo crimen en este filme coproducid­o por Martin Scorsese. Habrá atrocidade­s, vueltas de tuerca, corrupción, un Val Kilmer irreconoci­ble, un Toby Jones señorial y un J.K. Simmons jugando al hombre enigmático. Lo dicho: mejor estar atento desde que empieza el filme, porque aquí nadie rebobinará nada y si usted se perdió alguna pista, como suele decirse, fue. ■

 ??  ?? Un clima gélido. En los escenarios nórdicos donde hay mucha nieve.
Un clima gélido. En los escenarios nórdicos donde hay mucha nieve.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina