Estrellas amarillas y murales, otras formas de memoria
Los monolitos y placas no son la única manera que tienen los vecinos de recordar a sus familiares o amigos, y de visibilizar sus historias y casos. También están los murales y los carteles con estrellas amarillas. Estas últimas marcan el lugar en el que una persona perdió la vida en un siniestro vial. También hay baldosas que, por lo general, representan a desaparecidos durante la última dictadura. Otra opción son las placas o crucecitas en el piso. O las bicicletas blancas, puestas donde murió un ciclista.
Mauro “el Melli” Juárez tiene su monolito en la plaza Villa Real. “Era su lugar y el de sus amigos, que siempre se juntaban ahí”, dice Cristina (70), su mamá. “El Melli” falleció en Cromañón. En cada aniversario sus amigos, en la plaza, hacen un asado, cuelgan una bandera con su rostro y lo recuerdan. A él y a “Pachucha”, otro amigo que perdieron aquella noche.
“El monolito me hace sentir más acompañada. Es ir y enterarme cosas lindas que hacía mi hijo, que me cuentan los vecinos y jubilados del centro”.
Las estrellas amarillas que recuerdan a víctimas de la inseguridad vial son casi 200 en la Ciudad. La propuesta es sencilla: colocar carteles con una estrella en lugares donde se produjeron accidentes de tránsito con víctimas fatales. ¿Cuál es el mensaje que se busca transmitir? Según explicó en su momento Viviam Perrone, de la Asociación Madres del Dolor, la idea es que “la gente que circula por la Ciudad sepa que en ese lugar murió alguien por una imprudencia en el tránsito. Es un modo de prevenir y de concientizar a la gente”, explicó.
La iniciativa de los murales dedicados a víctimas del tránsito es relativamente nueva en la Ciudad, pero lleva más años en otras capitales de América latina. Aquí cuenta con la colaboración de artistas callejeros famosos. ■