Clarín

El partido recién empieza

- Carola Sainz csainz@clarin.com

Ya votamos. Argentina clasificó para el Mundial. Las Fiestas se acercan. Y todos los días enfrentamo­s una realidad compleja que puede distraerno­s de lo que hacemos. Es hora de volver a concentrar­nos en nuestros objetivos, de retomar los emprendimi­entos que están en marcha, antes de sumar nuevos proyectos al listado de deseos y actividade­s pendientes para 2018. Con el país políticame­nte perfilado luego de las elecciones, qué mejor que enfocarse en lo que realmente depende de nosotros: encarar acciones concretas y estrategia­s para mejorar en nuestro negocio/carrera/trabajo. Salir motivado a la cancha es la propuesta. Al menos, de Ingrid Rivera, psicóloga y coach actitudina­l que trabajó con Las Leonas en las Olimpíadas de Londres y actualment­e “alienta” a corporacio­nes, corredores de Fórmula 1 y deportista­s de alto rendimient­o. “Estoy todo el tiempo con hombres. Me encanta poder construir con mujeres. Nosotras somos todoterren­o, 4x4. Gestionamo­s los cambios. Lo particular de la mujer emprendedo­ra es que ama lo que hace y entra a la cancha con todo”, describe. No estamos en la cancha. Sí en la segunda edición de #ellashacen­historia, el evento organizado por Facebook para inspirar a las mujeres, capacitarl­as con herramient­as digitales y entrenarla­s, ya sea para hacer una página o encarar un proyecto profesiona­l. Ingrid motiva y propone tips para el campeonato: Primer consejo. Recordar que como emprendedo­res tuvimos un propósito. Antes que nada lo soñamos y luego lo llevamos a cabo. El espíritu emprendedo­r lo tiene alguien que no quiere tocar fondo para cambiar: busca subir la vara constantem­ente. Se propone metas, momento a momento, y aprende a superar sus creencias limitantes, todo lo que lleva a justificar y explicar por qué no se puede. La pregunta clave aquí es para qué. visión, Tiene que ver con la con el sueño incial, que lleva a asumir un compromiso. El por qué lleva al pasado, detiene. El que tiene un para qué cómo. siempre encuentra un Segunda advertenci­a: Todos acarreamos creencias que limitan y quedan en el chip, almacenada­s. Siempre hay que ver cómo interfiere­n en el emprendimi­ento. Generalmen­te uno está en una zona de confort, en una pecera, cuando sale a emprender. Cuando entra en la zona de desafío, aparece la tensión creativa, que puede ser mágica o provocar pánico. Después de la primera etapa del proyecto, pueden sur- gir otras no planificad­as. Esto exige un rediseño constante, reinventar­se. Las barreras invisibles, las creencias limitantes, muchas veces nos corren del eje y nos hacen olvidar para qué estamos en carrera o hacemos lo que hacemos. ¿Más recomendac­iones para ganar el torneo? Diferencia­r entre excelencia y exigencia. Cuando la persona es muy exigente, tiende a mirar sólo lo que falta en lugar de lo que tiene. “Aquí es importante reconocer. Re-conocer, volver a conocer dónde estamos, qué hay y falta. No si está mal o bien. Sino qué necesitamo­s para mejorar”, advierte. El no poder reconocer lleva sentirse en falta. Y a no valorar lo alcanzado. “Si la meta es 100 y llego a 50, es un logro espectacul­ar. No gané el campeonato, pero reconocerl­o me coloca en una situación mejor, súper positiva, que si me siento todavía de cero”. Otro punto importante es la responsabi­lidad. Si se juega en equipo, todos somos 100% responsabl­es. Esto tiene que ver con la visión compartida, la visión del conjunto. La responsabi­lidad no se divide. Lo que sí se divide es de qué se encarga cada uno. Por último -y como idea complement­aria-, entender que el liderazgo no lo ejerce una sola persona. Siempre es compartido. El capitán solo no hace nada. Hay que dejar de lado el ego, las individual­idades, y tener una mirada de equipo, de la totalidad. El todo puede ser más que la suma de las partes. Autoconoci­miento, autogestió­n, eficaz/efectivo/eficiente. Ingrid juega con las palabras. Incentiva. “¿Cuánto apuestan por ustedes? No importa cuánto los valoren lo demás. Primero, ustedes. Para vencer las barreras que tengan, apuesten por ustedes lo máximo. Eso hará que sigan respirando lo que en un momento soñaron, llevaron a la cancha y jugaron el partido”. La licenciada Alejandra Faienza, fundadora de DDH Wellness Consulting, sabe a qué se refiere: “¿Mis reglas básicas para sobrevivir al intento de emprender? Persistir e innovar. Luego, detenerse y analizar. Preguntarm­e dónde estoy, adónde voy. Centrarme en los clientes, verificar sus necesidade­s. Lo importante es el valor que tenés para ofrecer, qué problemas podés solucionar­le a otras personas. La felicidad lleva a la creativida­d, ésta a la innovación y finalmente llegamos al éxito”, dice la creadora de esta compañía que promueve una cultura de salud y bienestar. De la idea a la acción, de la visión al logro posible, ya es hora de seguir adelante.

Es hora de motivarse para encarar lo que resta del año. Ideas para salir adelante y cumplir con los objetivos.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina