Por la despedida digna
Golfista.
Acosado por los escándalos, la carrera del ex número 1 del mundo se desbarrancó. Ahora a los 41 años volverá a jugar. “Quiero competir en el golf y vivir sin este dolor que lleva tanto tiempo”, dijo.
El orgullo se lo demanda. O, en términos mucho más humanos, la mera necesidad de ser uno quien dicte cuándo se termina la historia; y el deseo de darle otro final, uno más acorde a una carrera que supo estar bañada de gloria. Por eso Tiger Woods, ese que supo colarse-justifica-damenteen los paños cuando elc ro upier lanza las barajas de los Jordans, Federers, Schumachers o Maradonas, quiere intentarlo una vez más: después de cuatro operaciones en tres años y de múltiples episodios que sacudieron su vida personal, volverá a jugar al golf a fin de mes en el Hero World Challenge de Albany, un torneo a beneficio de su fundación en el que ya había intentado un retorno el año pasado. Será su primera aparición después de jugar en Dubai en febrero.
“Estoy ansioso por volver a competir; será genial unirme a los demás en el campo de Albany y quiero agradecerles a los aficionados por su inquebrantable apoyo durante mis lesiones”, expresó Woods (41 años) a través de un comunicado. El evento en el que retornará incluirá a los mejo- res golfistas del mundo como Jordan Spieth, Dustin Johnson, Justin Thomas y Hideki Matsuyama, entre otros.
En las últimas semanas varios posteos del golfista estadounidense en las redes sociales dieron lugar a las hipótesis sobre el posible retorno. El primero de ellos fue subido el 31 de agosto a su cuenta de Twitter (@TigerWoods) y en él, junto a la explica- ción de que había recibido el permiso del médico para jugar, se pudo verlo haciendo un approach. A partir de entonces en varios otros videos se pudo observa a Woods pegando una variedad de golpes; a algunos de ellos los acompañó con palabras como “progresando”.
“Realmente ha progresado. Está emocionado, siente que está listo para jugar. No sé cuándo lo decidió exac- tamente, pero nos llamó y nos dijo ‘Quiero volver, estoy listo’. Y no se habría comprometido a jugar en las Bahamas si no sintiera que realmente lo está”, le aseguró su agente, Mark Steinberg, al diario estadounidense USA Today.
Será la cuarta vez que Woods salte a un campo en 26 meses. El año pasado, en el propio Hero World Challenge había intentado su primer retor-
no luego de un año y cuatro meses: terminó 15° entre 17 competidores aunque logró 24 birdies. Ya en enero no pasó el corte en San Diego. “Es frustrante no jugar el fin de semana; quiero jugar muchos torneos porque no es lo mismo practicar con amigos que competir”, había dicho en aquel momento el segundo máximo ganador de Majors en la historia (suma 14 y apenas lo supera su compatriota Jack Nicklaus, que acumula nada menos que 18). El último paso por un cancha no terminó de la forma esperada: se retiró del Clásico del Desierto luego de la primera jornada. “Dice que no es el dolor del nervio que lo tuvo fuera tanto tiempo sino un espasmo en la espalda que, simplemente, no puede calmarlo. A primera vista espera poder estar recuperado pronto”, explicó Steinberg por entonces. Pero el dolor no se fue rápido y fácilmente y a fines de abril Woods debió pasar por el quirófano una vez más.
“El pronóstico a largo plazo es positivo - escribió en su página tras aquella última intervención quirúrgica-. Mi cirujano y mi fisioterapeuta me dijeron que la operación fue un éxito; lo que debo hacer es ir día a día. No hay apuro. Pero quiero jugar de nuevo profesionalmente”. Así, sin dar pasos en falso, se tomó la situación en el último tiempo.
Hace casi dos semanas su médico le dio el visto bueno para retomar completamente la actividad golfística y, desde entonces, Woods se estuvo poniendo a punto en Medalist, un club que está bien cerquita de la casa que tiene en la isla Júpiter, en la Florida estadounidense.
El jueves 30 ya está marcado con rojo en su calendario; ya sea el de su teléfono, uno impreso o el de su cabeza. Lo que es seguro es que Tiger Woods -que ganó el Hero World Challenge cinco veces- no dejará de soñar con un retorno que, esta vez sí, le permita volver a sentirse plenamente un golfista. ■
Espero volver a llevar una vida normal, competir en el golf profesional y vivir sin este dolor que lleva tanto tiempo”.
Tiger Woods
Golfista estadounidense