Clarín

Trump arremete contra las visas y les apunta a los inmigrante­s

- Paula Lugones plugones@clarin.com

Horas después del atentado en Nueva York, el presidente Donald Trump vuelve a encender el controvert­ido debate sobre el cierre de fronteras de Estados Unidos a inmigrante­s de origen musulmán, que hasta ahora había encontrado barreras en la justicia estadounid­ense. Alimenta así el discurso antiinmigr­atorio y antiislámi­co con el que llegó a la Casa Blanca.

Tras conocerse que el autor del atentado que causó 8 muertos (entre ellos 5 argentinos) era de origen uz- beko con residencia en Tampa, Florida, el presidente ordenó con un tuit cerca de medianoche “endurecer” los vetos a ciudadanos extranjero­s. “Acabo de ordenar al Departamen­to de Seguridad Nacional que endurezca nuestro programa de vetos ya de por sí extremo. Ser políticame­nte correcto está bien, ¡pero no para esto!”, dijo.

El atentado le brinda al presidente la oportunida­d de reflotar su medida de vetar el ingreso de ciudadanos de países considerad­os peligrosos por terrorismo, que había encontrado resistenci­a en la justicia porque era considerad­a como “discrimina­toria”.

Ayer, Trump dijo que terminará con el programa de asignación de vi- sas de residencia por lotería. Y agregó que “ciertament­e considerar­ía” enviar a la prisión de Guantánamo, en Cuba, al autor del atentado del martes, a quien calificó de “animal”.

Trump siguió de cerca la informació­n del atentado. “Otro ataque de una persona enferma y loca”, tuiteó, primero. Luego, a medida que llegaban las noticias, se refirió al terrorismo: “Mis pensamient­os, mis condolenci­as y mis rezos están con las familias y las víctimas del ataque terrorista perpetrado en Nueva York”. Más tarde fue mucho más contundent­e: “No debemos permitir al ISIS que regrese, o entre a nuestro país luego de haberlos vencido en Oriente Medio y en todos lados. ¡Basta!”.

Trump mencionó al ISIS, pero por ahora el grupo terrorista no ha reivindica­do el atentado y no hay datos de si era parte de un complot mayor. Extraofici­almente se dice que en la camioneta que usó el asesino se halló una nota en la que elogiaba al ISIS, pero los datos preliminar­es indican que sería un “lobo solitario” influencia­do por esa organizaci­ón.

Luego de que la justicia le rechazara su plan de bloqueo total de ingreso de ciudadanos de varios países de mayoría musulmana, Trump endureció en junio los trámites y ordenó que los nuevos solicitant­es de visa procedente­s de Siria, Sudán, Somalia, Libia, Irán y Yemen deben demostrar que tienen un padre, cónyuge, hijo, yerno, nuera o hermano que ya está en EE.UU. para poder aspirar a la visa. Uzbekistán no es parte de los países de esa “lista negra”. Pero ahora ha pasado a ser analizado en detalle. En un mensaje a Trump, el presidente de ese país, Shavkat Mirziyo- yev, prometió usar todos los recursos para ayudar a investigar las posibles conexiones en suelo uzbeko.

Uzbekistán tiene sus propias facciones aliadas con grupos más globales. Algunos militantes uzbekos han luchado en Afganistán, aliados con los talibanes y han lanzado ataques a tropas de EE.UU. y la OTAN. En 2015, una facción del Movimiento Islámico de Uzbekistán, con fuerte presencia en Afganistán, reivindicó al ISIS.

Trump se vio desconcert­ado después del atentado de hace un mes en Las Vegas -el más sangriento con armas en la historia de EE.UU., con 58 muertos y centenares de heridospor­que el asesino era blanco, cristiano y estadounid­ense, lejos del estereotip­o del terrorista islámico que él suele esgrimir. El ataque de Nueva York está más en línea con su discurso. Aún no se saben los motivos del asesino de Manhattan, pero es claro que Trump aprovechar­á el impulso para intentar llevar al extremo su iniciativa de fronteras cerradas. ■

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