Mendoza, San Juan y Tierra del Fuego dan pelea contra los cambios que impulsa Dujovne
Sus gobernadores resisten la reforma impositiva por los impactos en el vino y en el sector electrónico.
La reforma impositiva del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, que incluyó un impuesto interno al vino, dejó al gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, en una situación incómoda para quien es considerado uno de los principales aliados de Cambiemos. Ahora, el radical planea un embate contra el gravamen junto al gobernador peronista de San Juan, Sergio Uñac.
Desde julio comenzó a rondar el rumor de la intención del gobierno de Macri de equiparar al vino y los espumantes al resto de las bebidas con alcohol y azucaradas, pero Cornejo en público había negado esa posibilidad: “Estoy muy molesto con algunos dirigentes vitivinícolas, dicen que se va a agregar un impuesto al vino y es falso”, remarcó. Y apuntó contra las autoridades de la Corporación Vitivinícola (Coviar) y otras organizaciones a las que vinculó con el peronismo. Pero el martes esa versión se materializó y a coro, los funcionarios de Mendoza, legisladores y sector económico cuestionaron la suba de 10% para vinos y 17% para espumantes.
Ahora Cornejo (UCR), al frente de la principal provincia vitivinícola, dijo que es “inadmisible” el impuesto al vino y criticó que se lo coloque como dañino para la salud junto a las bebidas gaseosas y las cervezas.
Cornejo explicó que negoció el proyecto de borrador sobre las alícuotas de los impuestos internos para el vino ( ver “El radical Cornejo...).
La medida plantea también gravar del 20 por ciento a 29 por ciento a whisky, coñac y otras bebidas blancas. Según explicó Dujovne: “a mayor graduación alcohólica, más es la alícuota.”
Igual de crítico fue el gobernador de San Juan, Sergio Uñac (PJ): “Son proyectos que se hacen entre cuatro pare- des, alejados de las economías regionales. Que nos avisen si quieren aniquilar la vitivinicultura”.
El sanjuanino envió ayer a Mendoza a su ministro de Producción, Andrés Díaz Cano, para planear una resistencia conjunta. Pero los cuestionamientos recrudecieron en las segunda líneas de los gobiernos cuyanos: “Los funcionarios que deciden aplicar el impuesto al vino cuando el mercado está en baja, no conocen el país más allá de la General Paz”, escribió en twitter el vicepresidente de Diputados y ex gobernador sanjuanino, José Luis Gioja (PJ). Y la vicegobernadora de Mendoza, la radical Laura Montero, usó la misma red social para oponerse al gravamen: “Evidentemente @NicoDujovne no entiende nada de las econo- mías regionales y de la crisis a la que fueron sometidas en la época K”, escribió. El sector bodeguero se declaró en alerta.
El sector de los electrodomésticos también está en pie de guerra, en este caso por una medida que Dujovne busca aplicar en dirección contraria: la exención de gravamen. La gobernadora peronista se puso al frente de una pelea que para los empresarios significa ponerle límite a una lluvia de importados que también se beneficiarían con la rebaja tributaria.
Con rapidez de reflejo, Rosana Bertone le envió una carta al Presidente reclamándole una reunión urgente para que revea la propuesta. “Tengo el agrado de dirigirme a Ud, en mi carácter de Gobernadora de la provincia de Tierra del Fuego, a fin de solicitar una audiencia en carácter de urgente”, comienza la nota a la que accedió Clarín. La cita solicitada es “para abordar la situación de la industria y el empleo en mi Provincia que se vería gravemente afectada de prosperar el proyecto de ley que Ministro de Hacienda Nicolás Dujovne anunciara”, sostiene. Los empresarios piden rebajas exclusivas para la producción nacional. ■
El gobernador Uñac dijo sobre la reforma “Son proyectos que se hacen entre cuatro paredes”.