Sin prejuicios
En pleno show, la cantante tuvo un fogoso acercamiento a una de sus bailarinas para dar un mensaje.
En dos horas de canto y baile en el Luna lanzó sus nuevas canciones, incluyendo una balada dedicada a sus abuelos. Y sorprendió cuando, en “Irresistible” besó apasionadamente a una de sus bailarinas.
El Luna Park fue el epicentro de un temblor humano que unió gritos, llantos, alegría y mucho pop: Lali Espósito descargó toda su artillería pesada para brindar un espectáculo de alta calidad. Ocurrió el viernes, y se repetirá este viernes en el mismo estadio. Pero uno de los momentos que más llamó la atención en las más de dos horas de show fue ése en el que le dio un apasionado beso a Ayelén, una de sus bailarinas.
El inesperado gesto se dio en el final de la canción Irresistible, una de las 29 que interpretó Lali. Dicho momento fue el más ovacionado y aplaudido de la noche por sus fanáti
cas, que se vieron sorprendidas por el beso de su ídola. En las redes sociales también causó furor: enseguida se viralizaron fotos del momento.
“Una bailarina se chapó a Lali Espósito. Está siendo la envidia de todo el mundo esa mina”, tuiteó, por ejemplo, @camiicosta. Hubo, también, algunas reacciones adversas, de quienes criticaron el beso por considerarlo inadecuado para una artista que tiene tanto alcance con adolescentes y niños. Pero ella lo hizo, justamente, para dejar sentada su posición
acerca de la diversidad sexual y promover la inclusión.
Diez bailarines y cinco músicos la acompañaron durante el concierto en el que Lali demostró una vez más por qué es una de las artistas preferidas de las millennials. Tuvo la visita de tres invitados: Leo García, Abraham Mateo y Miss Bolivia.
Este primer show de Lali en vivo (que también se presentará en Rosario y Córdoba) fue el marco ideal para
que Lali lanzara una nueva canción. Sobre el final del show presentó Tu
sonrisa, una balada dedicada a sus abuelos, en la que la artista sorprendió tocando la armónica.
Sus años dentro de la factoría Cris Morena le brindaron a Lali un conocimiento del escenario que a cualquier artista le llevaría décadas aprender. Desde cómo pararse, a poder bailar coreografías duras y cantar cómodamente, y a cómo dirigirse e interac- tuar con el público. Con todos esos puntos bien aceitados, la tecnología, los vestuarios llamativos, los invitados y la charla con sus fans completaron el combo a la perfección. Con va
rias frutillitas de postre, entre las que se contó el momento en que los cinco ganadores de un concurso que Lali había organizado en las redes sociales subieron al escenario a cantar con ella Amor presente. Y, claro, el fogoso beso con Ayelén.