Vandenbroele ya es un “testigo protegido” y rige el secreto de sumario
El testimonio del presunto testaferro de Boudou podría representar un giro relevante en la causa.
Todo llevó poco más de media hora y después de la homologación del acuerdo Alejandro Vandenbroele se convirtió oficialmente en un “imputado arrepentido”. El presunto testaferro de Amado Boudou estuvo en los tribunales de Comodoro Py después de haber declarado nueve horas ante el fiscal Jorge Di Lello en el marco del Régimen de testigos e imputados protegidos. Fue citado por el juez Ariel Lijo para una audiencia de homologación y se dictó el secreto de sumario.
Vandenbroele, de gorra con vicera y anteojos de sol, fue trasladado bajo la custodia de la policía Federal. El dueño de la firma The Old Fund está señalado como el testaferro del ex vicepresidente y su extensa declaración del miércoles podría representar un giro relevante en las causas judiciales que aún no llegaron a juicio oral. Se trata de tres expedientes en los que está imputado junto a Boudou.
En su declaración, el empresario dijo que en Ciccone “confluyeron intereses políticos, económicos y estratégicos relacionados con que Argentina no cediera a una empresa de otro país, la impresión de papel moneda”.
La audiencia de homologación era necesaria para que rija el acuerdo que Vandenbroele firmó con la fiscalía el lunes. En el encuentro con Lijo, participaron Vandenbroele junto a sus defensores oficiales, Juan Martín Vicco y Gustavo Kolman, el fiscal Di Lello. Ante Lijo, reconoció tener conocimiento del alcance del acuerdo suscripto y las consecuencias del mismo. Si en el proceso de corroboración de la información se determina que él minitó, no sólo deja de estar dentro del programa, sino que podría terminar preso.
Durante la reunión en la que sólo to- maron café, se leyó la declaración de 25 carillas que realizó el miércoles ante el fiscal Di Lello. Vandenbroele a quien se lo notó “cansado, pero firme al hablar”, reconoció haber declarado de forma voluntaria. Ahora corren los plazos: la Justicia tiene un año para determinar si la información y documentación aportada en los tres expedientes en proceso de investigación, se ajusta a lo que exige la Ley y si resulta relevante .
La normativa señala que para acceder a la reducción de pena: La información aportada “deberá referirse únicamente a los hechos ilícitos de los que haya sido partícipe y a sujetos cuya responsabilidad penal sea igual o mayor a la del imputado arrepentido”.
Vandenbroele hace dos días, ante el fiscal habló sobre las tres investigaciones en las que está imputado. En primer lugar y mencionando a Jorge Brito dueño del Banco Macro, habló de la causa sobre la reestructuración de la deuda que Formosa tenía con el Estado. Para resolver la situación se contrató una consultoría que realizó The Old Fund. Por ese trabajo Vandenbroele cobró $ 7,8 millones, unos 2 millones de dólares al valor de ese momento, en 2010. Habría dado información sobre cómo se distribuyó el dinero obtenido. Todo es parte del acuerdo de confidencialidad. También, aportó información y documentación sobre “Ciccone 2” que investiga el origen de los fondos utilizados para el salvataje de la Calcográfica que mantenía una deuda con la AFIP de 60 millones de dólares. Se escuchó el nombre del banquero Raúl Monetta. En este punto, Vandenbroele se refirió a los aportesde dinero percibidos, a la intervención del organismo recaudador que dirigía Ricardo Echegaray, y cómo fue la reactivación de la imprenta. ■