Duro cruce de Rajoy con la centroizquierda catalana por una denuncia sin pruebas
La número dos de Esquerra Republicana dijo que Madrid “amenazó con muertos en las calles”.
La “número dos” del partido independentista Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Marta Rovira, lanzó una fuerte denuncia contra el gobierno de España, sin aportar pruebas, lo que provocó la reacción de las autoridades nacionales y del propio jefe de Gobierno, Mariano Rajoy.
“El Gobierno español, a través de múltiples frentes, nos amenazó con muertos en las calles” si seguíamos con la declaración de independencia, sostuvo Rovira ante la radio pública catalana Rac 1. “Directamente nos de- cían esto; que habría sangre y que teníamos que parar porque no dudarían esta vez, y que esta vez no serían balas de goma”, agregó, sin dar detalles de quién lo había dicho.
La dirigente de ERC aseguró que “las fuentes que llegaban eran contrastadas”, aunque evitó precisar el origen de la información. También señaló que el ya destituido “Govern” de Carles Puigdemont tenía datos sobre movimientos de armas del Ejército español a una base en Cataluña.
Rajoy respondió con indignación. Desde Suecia, donde participó en una cumbre social de la Unión Europea, el mandatario dijo que la denuncia era “una vergüenza”. “No hay calificativo que tenga yo para aplicar a esa afirmación. Dejémoslo en que es absolutamente falso, es una enorme mentira y sobre todo es una vergüenza y creo que en la vida no vale todo. Cada uno puede defender sus posiciones como quiera pero esto es into- lerable”, señaló.
Luego, el vocero del Ejecutivo español, Iñigo Méndez de Vigo, tachó de “burda patraña” las declaraciones de Rovira. “Los dirigentes secesionistas nos han acostumbrado a mentir. Fue mentira tras mentira. Lo que acaba de decir no tiene absolutamente nada que ver con la realidad. Pero a esto nos están acostumbrando estos dirigentes”, concluyó Méndez de Vigo, que pidió a los catalanes tomar nota de “quién les miente”.
También el secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, criticó la “victimización” de los independentistas y sostuvo que era “falsa” la acusación de la secretaria general de Esquerra. “Lo que dice esa señora es falso, y lo sabe”, afirmó contundente el líder socialista en Valladolid.
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, apuntó en la misma línea. Acusó a Rovira de “mentir” y “victimizarse”. “Cuando parecía que los separatistas no podían caer más bajo, llega la designada por Junqueras para mentir y hacer victimismo otra vez”, escribió en su cuenta de Twitter.
El Gobierno catalán de Puigdemont abrió una crisis sin precedentes en España con su plan soberanista, que culminó el 27 de octubre con el Parlamento en Barcelona aprobando una resolución para crear una república catalana independiente.
El gobierno de Rajoy respondió ese mismo día interviniendo la autonomía de Cataluña, destituyendo al “Govern” y convocando elecciones auto- nómicas el 21 de diciembre. Todo el proceso, apoyado por la mayoría de la oposición, se produjo sin incidentes. Desde entonces, diversos líderes de ERC y otras fuerzas soberanistas admitieron que el proceso independentista fracasó porque el “Govern” no estaba “preparado” y porque en Cataluña no había una “mayoría social” dispuesta a romper con España.
Más allá de las declaraciones, los partidos políticos cerraron ayer sus listas para las elecciones regionales de diciembre, y a las que el independentismo concurrirá muy dividido y con parte de sus candidatos en prisión o fuera de España.
Es el caso del expresidente del Gobierno catalán Carles Puigdemont y de cuatro de sus exconsejeros, que ayer prestaron declaración ante la Justicia de Bélgica, país al que llegaron hace casi 20 días y desde donde ya han iniciado una precampaña electoral a la espera de saber si son devueltos a España.
Desde Bruselas, y mientras se decide su extradición por los delitos de rebelión, sedición y malversación de fondos públicos, Puigdemont se desmarcó del que fue su partido en el Gobierno regional, el PDeCat (centroderecha) para crear una lista propia y cargada de candidatos “independientes”, bajo el nombre Junts per Catalunya (JxC), que él mismo encabeza. Se aleja así de quienes fueron sus socios en el Gobierno regional cesado, los republicanos de izquierdas de ERC, que concurrirán con el ex vice catalán Oriol Junqueras. ■