Revelaron que espías y autos de la SIDE también ayudaban en la custodia de Nisman
Los guardaespaldas de la Federal informaron que "Cato" y otros agentes colaboraron con la seguridad.
El ex fiscal de la AMIA Alberto Nisman no solo tenía el celular pinchado y un agente de inteligencia de la Prefectura en la puerta de su departamento en las torres Le Parc, sino que también tuvo tres espías de la SIDE, un teléfono "seguro" y un auto no identificado asignado a su custodia policial. En sus declaraciones indagatorias ante el juez federal Julián Ercolini y el fiscal Eduardo Taiano los ex custodios policiales Rubén Benítez, Luis Miño y Néstor Durán, imputados por incumplimiento de los deberes de funcionario público, revelaron que desde el 2004 hasta el 2013 se sumaron a la custodias espías con los nombres de guerra "Cato", "Martín" y "Chiquito", entre otros.
Estas revelaciones incrementan la telaraña de espionaje que rodeó a Nisman hasta su muerte violenta el 18 de enero del 2013 y abre nuevas incógnitas que aumentan las dudas en este caso. También se suman a las misteriosas llamadas activadas entre los principales jefes de inteligencia del kirchnerismo, desde el ex director de la SIDE Antonio Stiuso al ex jefe del Ejército y director de Inteligencia de esa fuerza, general César Milani. El fiscal seguramente pedirá a la AFI (ex SIDE) que identifique a "Cato" y los otros agentes.
Según fuentes judiciales consultadas por Clarín, en el 2004, Benítez dijo que “Nisman me presentó a un hombre que dijo que era de la “secretaría” y que iba a estar conmigo... El apodo de esta persona era “Cato”, con quien mucho no hablaba porque yo le esquivo a esa clase de personas. En una conversación, lo escuché decir que hablaba de sí mismo como Carnero o Garnero. Antes de “Cato”, había entrado otra persona apodado “Chiquito” y que también era de la Secretaría de Inteligencia. La tarea de éstos era reforzar la custodia; yo conducía y ellos se sentaban atrás”. En los tribunales de Comodoro Py se preguntaron si la presencia de estos agentes de la SIDE no eran un "anillo de seguridad" suplementario creado por Stiuso alrededor de Nisman hasta que fue echado por Cristina Kirchner en diciembre del 2014.
“No sé cómo los asignaron a la custodia, porque yo fui un día y me dijo ellos van a estar con usted. Después entro un tal Martín que cubrió unas vacaciones. Todo esto fue después del juicio de la AMIA (que terminó en el 2004), no recuerdo la fecha exacta. Junto a esta gente en un momento nos dedicábamos al traslado de la hija al colegio”, añadió.
"Los dos entraban conmigo y yo con ellos no hablaba mucho porque iban detrás. Esta situación duró aproximadamente un año. Un día llamé el día anterior para hablar con el doctor, y él me dijo a tal hora a mi casa. Al día siguiente fuimos y lo buscamos en un auto que era de inteligencia”. “Después de ahí me dijo que fuéramos a la fiscalía, la que hasta ese momento yo no conocía. Llegamos, y estacionamos sobre Avenida de Mayo, luego de lo cual le dijo a “Cato” que fuese o volviera a su destino. Cuando le pregunté a “Cato” que pasó, me dijo que no sabía y después de ese episodio no lo vi nunca más ”, agregó Benítez. “Había dos coches de alquiler para cumplir el servicio que los alquilaba la Fiscalía o el Ministerios de Justicia y había también un Renault Megane que era de inteligencia, pero que después no se usó más”, subrayó Benítez. “Los vehículos de alquiler eran marca Ford, y se iban renovando cada tanto tiempo. Cuando lo trasladábamos íbamos en un solo auto, lo que era dispuesto por el propio Fiscal. Todo era así con él”, explicó Benítez. Por su parte, Durán dijo que “donde se guardaban los autos, que era en la fiscalía, ya que se trataba de autos alquilados a la empresa Serra Lima por el Ministerio de Seguridad. Había un auto marca Ford Focus a nombre de la SIDE que se usaba en caso de ser necesario la utilización de tres autos en las tareas que nos indicaba el Dr. Nisman”. “Nosotros la llamábamos la “remisería federal”, agregó Durán en coincidencia con Benítez.
Por su parte, Luis Miño, dijo que conocía a Luis Goncálvez Pereira- un ex policía que murió el año pasado en un asalto de piratas del asfalto- “porque era el administrador de la empresa y de la flota telefónica. Nosotros nos comunicábamos con teléfonos de esa flota para pedir novedades para el día siguiente. No recuerdo qué números eran”. Luis, al igual que su hermano Carlos, trabajan para la empresa Excel en sus ratos libres. Miño pidió que costara en el acta que “solo quiero dejar asentado que no sé con quién hablaba el Dr. Nisman cuando yo le prestaba mi teléfono. Esa es mi preocupación, nada más”. Otro interrogante. ■