El Gobierno se reunió con la familia del mapuche muerto y le ofreció ayuda
Fue un encuentro de dos horas. Les brindarán asistencia legal, psicológica, social y alimentaria.
El gobierno se reunió con la familia del joven muerto el sábado pasado, Rafael Nahuel, en el marco de un ope- rativo de Prefectura Naval en el predio ocupado de villa Mascardi, a 35 kilómetros de Bariloche. El ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich quiere evitar otro caso como el de Santiago Maldonado en todos los órdenes. La relación entre el Gobierno y Sergio y Germán Maldonado, hermanos del artesano muerto en Cushamen, trae oscuros recuerdos a los funcionarios de Bullrich. "Esa mala relación dificultó el proceso de investigación", dicen de modo permanente fuentes de gobierno.
En este caso, Bullrich envío a alguien de su entera confianza para tra- tar de tejer lazos con la familia del soldador. Este jueves, Daniel Barberis, secretario de Violencia Institucional del ministerio, se reunió por espacio de varias horas con la madre de Nahuel, Graciela Salvó, el padre del joven, Alejandro y su hermano Pablo.
La idea es poner cuanto antes en marcha un Protocolo de Contención para la familia que abarca aspectos legales, económicos, psicológicos, sociales, entre otros. Barberis se encontró de lleno con un panorama de extrema pobreza, según le relató a Clarín. "Es una familia que necesita ayuda inmediata. Tiene problemas de dinero y trabajo muy serios y necesitan alimentos, solo para empezar. Son gente tranquila y humilde", indicó el funcionario.
Barberis les ofreció a los NahuelSalvo un protocolo de contención que tiene a disposición su área del ministerio para manejar estos casos con el mayor equilibrio posible. El programa incluye asesoramiento legal a través de abogados especializados en temas de violencia institucional, líneas de ayuda alimenticia, económica y laboral de ser necesario, y seguimiento de las personas que integran el núcleo familiar.
"Les ofrecimos apoyo Psicológico, Contención Social y orientación en los temas que vayan surgiendo y que necesiten evacuar en las distintas áreas de gobiernos para remover obstáculos de gestión", detalló.
"Todas las posibilidades están abiertas y esperamos que estén dispuestos a aceptar lo que podemos ofrecerles para transitar este momento tan delicado. En principio, y de modo personal, pensé, necesitan comer, tener tranquilidad para poder pensar adecuadamente", relató Barberis. El funcionario dispuso de la compra de un pack de alimentos para ser entregados a la brevedad.
Barbieri le propuso a Pablo tener una charla directa con la ministra Bullrich en las próximas horas. El hermano aceptó. La madre, por su lado, tiene dificultades para oír y se encuentra muy afectada por el fallecimiento de su hijo al punto que pasa días enteros llorando, le contó Pablo a Barberis.
La familia Nahuel, de acuerdo a lo que indica el funcionario, se mostró accesible y durante la primera conversación de alrededor de dos horas con ellos, no manifestó quejas contra el gobierno de Mauricio Macri o la propia Bullrich.
Esto ya venía evidenciándose en las declaraciones del padre, la madre y el hermano a la prensa local en la cual revelaron una profunda molestia contra los sectores más radicalizados mapuches que ocupan Mascardi. La hermana de Graciela, María Huala es una de las voceras de la comunidad Lafken Winkul Mapu. El padre del joven responsabilizó en primer término a la "policía" y le exigió al juez Gustavo Villanueva que proceda con la investigación hasta ahora pospuesta en el territorio tomado.
La madre apunto siempre en contra del movimiento Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), que responde a Facundo Jones Huala. Todos estos dichos fueron reiterados en su presencia, dijo el funcionario.
Barberis espera que los Nahuel continúen en contacto con sus colaboradores cuando el parta de Bariloche. La madre decidió mantenerse a distancia del contacto con otros funcionarios, organismos de sociales o de derechos humanos, dejando esa tarea en los hombros de Pablo. ■