Hasta que no haya una prueba, el Gobierno no decretará las muertes

Esa medida no se tomará hasta que, por lo menos, se consiga “una foto del submarino”.

El Gobierno, por ahora, no dará por muertos a los 44 tripulantes del ARA San Juan ni decretará el duelo nacional hasta no tener “por lo menos una foto del submarino hundido”, informaron fuentes del Gobierno a Clarín.

A 15 días de la puesta en marcha del protocolo del convenio internacional sobre búsqueda y salvamento marítimos (SAR por las siglas en inglés de Search and rescue) de la Organización Marítima Internacional (OMI), el ministro de Defensa, Oscar Aguad, se reunió ayer con el jefe de la Armada, almirante Marcelo Srur, y decidió pasar a la fase de solo búsqueda.

“En la OMI ya nos habían dado el doble de tiempo para la aplicación de la primera fase del SAR y debimos aceptar las normas internacionales”, explicó la fuente. Un par de países cooperantes había preguntado al Gobierno hasta cuándo iba a seguir la primera fase del SAR. “No había alternativas frente al protocolo del SAR”, explicaron las fuentes.

Pero el paso a esta fase “de ningún modo significa que abandonamos la búsqueda del San Juan. La decisión política es seguir buscándolo con todos nuestros recursos y el apoyo internacional”, agregaron.

Previamente, el ministro de Defensa habría consultado la decisión con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, quien está en comunicación permanente con el presidente Mauricio Macri.

Cuando se le preguntó a las fuentes si además de cambiar de fase se iba a decretar legalmente la muerte de los tripulantes y ordenar un duelo nacional, como corresponde, contestaron categóricamente que “no hasta que tengamos una prueba fehaciente que sea, por lo menos, una foto del submarino hundido”.

El operativo seguirá adelante aunque sea muy costoso y complejo. Por ejemplo, el buque de la Armada del Brasil se averió y volvió a su base para ser reparado sin posibilidades de regresar en el corto plazo. Mientras que uno de los buques de Gran Bretaña también se averió pero volverá para seguir cooperando con la búsqueda del submarino más moderno que tenía la Argentina y su más letal arma estratégica en el mar.

Mañana llegará un avión de la marina de EE.UU con un minisubmarino no tripulado que puede navegar hasta una profundidad de 6 mil metros y luego arribará otro de la Federación Rusa con un sumergible con la misma capacidad.

Esa característica de los minisubmarinos confirma que el Gobierno y la Marina suponen que el San Juan habría caído afuera de la plataforma continental argentina que tiene hasta 300 metros de profundidad, es decir en la ladera que lleva al talud que tiene entre “mil y 6 mil metros". El San Juan podía resistir hasta 600 metros y luego de esa profundidad su casco de acero por la presión comienza a estrujarse.

Al preguntársele a las fuentes hasta cuándo iba a durar el operativo de búsqueda, contestaron: “No tenemos fecha. Si hace falta seguiremos hasta más allá del fin de año”.

Aguad está agradecido con su colega de la cancillería, Jorge Faurie, por los informes que consiguió el embajador argentino en Austria, Rafael Grossi, de la Organización para la Prohibición Total de Pruebas Nucleares (CTBTO, por sus siglas en inglés). El CTBTO detectó, la semana pasada, la anomalía hidroacústica emitida por el San Juan con su red internacional de hidrófonos creada para registrar pruebas nucleares. ■