Marchas y obras públicas, una combinación que termina en caos
A las manifestaciones diarias se suman los cortes por el Paseo del Bajo, los viaductos y arreglos de empresas.
Diciembre es un mes habitualmente complicado para moverse en Buenos Aires. Por el cierre del año político y las sesiones del Congreso que defi- nen temas cruciales, se multiplican los piquetes y las marchas. Si a esto se le suman las obras públicas simultáneas que afectan varias avenidas y vías claves para la circulación, el tránsito se vuelve un caos. Y lo peor: muchas veces no están bien señalizados y una vez que se cae en la “trampa” no hay escapatoria.
Esta semana arrancó con un acampe sobre la 9 de Julio, frente al Ministerio de Desarrollo Social. Los manifestantes permanecieron una noche completa. Las protestas continuaron el martes y ayer, en la zona de Congreso: columnas de ATE, un sector de la CTA, gremios docentes y organizaciones sociales y de izquierda marcharon desde allí a Plaza de Mayo, que además está en plena remodelación. A las 14.30 hubo un corte sobre Paseo Colón, frente al Ministerio de Educación porteño.
Más allá de protestas y acampes -la Policía de la Ciudad hace poco para evitar-, la 9 de Julio sufre las mar- chas que se trasladan por la avenida de Mayo o por Corrientes. Y en ocasiones también se producen cortes en los carriles del Metrobus.
Según la consultora Diagnóstico Político, noviembre fue el mes con más piquetes de 2017. La Capital Federal fue el segundo distrito con más cortes, detrás de la Provincia de Buenos Aires. En la Ciudad hubo 115 bloqueos. Quienes más cortaron calles fueron las organizaciones sociales, seguidos por trabajadores estatales y agrupaciones políticas.
En cuanto a las obras, la que más complica el tránsito es la construcción del Paseo del Bajo, que suma cortes en la zona de Puerto Madero. Los obradores se extienden en el eje Madero-Huergo e incluyen cortes parciales y totales que provocan demoras en el tránsito. Si muchas veces ya la autopista 25 de Mayo colapsa de tránsito, bajar por estos días es incluso pero.
Además, y en otros barrios como Palermo, Belgrano o Paternal, se suman las obras de los viaductos para elevar los trenes Mitre y San Martín. Allí hay barreras cerradas (las de La Pampa y Olazábal en el Mitre). Y también la estación Lisandro de la Torre, que será construida en altura.
También está cerrada la barrera de Balbín y las vías del Mitre, en Saavedra, donde construyen un túnel. Y muchas veces, los automovilistas se eencuentran con cortes sorpresivos en cuadras que están podandow