Las llamadas desde el submarino no están grabadas
Lo confirmaron ayer la empresa de comunicaciones y la Armada.
Las últimas llamadas realizadas por la tripulación del ARA San Juan antes de desaparecer el 15 de noviembre en aguas del Atlántico Sur no fueron grabadas. Así lo informó ayer al mediodía en rueda de prensa el vocero de la Armada, Enrique Balbi, horas después de que la empresa Iridium, a cargo de las comunicaciones satelitales del submarino, se los confirmara vía mail.
“Recibimos oficialmente de Iridium la información de que no graban las llamadas de voz por telefonía satelital”, explicó Balbi. En el mensaje de correo electrónico, que está en inglés y al que Clarín tuvo acceso, la compañía estadounidense explica que Iridium, “en curso normal de los asuntos, no realiza grabaciones de voz de las comunicaciones” entrantes ni salientes de quienes contratan su servicio.
La Armada, según había comentado el propio Balbi en la conferencia del último miércoles, tampoco posee un “registro de grabación” de estos contactos.
En el mail, enviado el lunes por la tarde, Iridium aclara además que no tiene registro de que se hayan gra- bado correos de voz en el período que comprende al 13, 14 y 15 de noviembre, los días previos a la desaparición del buque que había zarpado de Ushuaia hacia Mar del Plata el 8 de noviembre, hace hoy un mes.
Según trascendió en las últimas horas, el ARA San Juan realizó 13 intentos de enlace con tierra entre las 23.42 del martes 14, cuando se informó sobre una avería en las baterías del buque, y las 8.36 del día siguiente, cuando trató (sin éxito) conectarse a Internet por última vez.
En el medio hubo otras tres llamadas de voz exitosas entre el submarino y el comandante de fuerza de submarinos a través de Iridium: una a las 00.33, para informar su posición; una a las 00.50, cuando el comandante de la fuerza de submarinos contactó a la unidad para ampliar información sobre la falla; y una última a las 07.19, cuando la tripulación consultó si habían recibido un mensaje de radiofrecuencia anterior donde se informaba que estaban navegando a plano periscopio.
“La unidad disponía de sistemas de comunicación de radiofrecuencia y satelitales. Ambos pueden transmitir voz y datos. El de radiofrecuencia, que se usó en tres oportunidades para enviar mensajes navales, se comunica con estaciones o unidades de la Armada o buque cercanos de forma encriptada”, explicó a Carlos Daniel Martínez, capitán de navío, ingeniero electrónico especialista en comunicaciones y subdirector general de comunicaciones e informática de la Armada.
Martínez, quien acompañó a Balbi en la conferencia de prensa de ayer, explicó también que los siete intentos de conexión a Internet realizados a través del sistema satelital Iridium “no son llamadas de voz, sino intentos de comunicación que pueden o no resultar en transferencia real de datos”. “Funciona como un módem. Y aunque los enlaces no tengan éxito igual hay una facturación. Si fueron fallidos es razonable que hayan intentado conectarse varias veces”, agregó el capitán.
Balbi, quien aclaró que la Armada “no ocultó información” en ningún momento, insistió en que “ninguna” de las llamadas realizadas por el ARA San Juan fueron “de emergencia” y que “las principales” fueron informadas “en tiempo y forma” a la base de Puerto Belgrano, a las autoridades navales de Buenos Aires y al Ministerio de Defensa. ■