“Pido a los profesores que dejen fluir nuestra imaginación estudiantil”
Tengo 16 años y soy un estudiante de secundario. Quisiera plantear a través de estas líneas un tema no tan común en la sociedad, principalmente que incluye a los adolescentes y niños.
El colegio y la enseñanza abarcan una muy importante y esencial parte de nuestras vidas: nos preparan para un futuro, para estar dispuestos en cualquier situación que se nos presente.
Es correcto aprender nuevos conocimientos y adquirir formas distintas de pensar, aunque considero que se nos está privando a nosotros, los dueños del futuro, del acceso a la creatividad y a la imaginación.
Muchas veces nos encontramos en situaciones como estas, por ejemplo cuando debemos leer textos muy extensos de un tema que quizás no nos interese a todos. O cuando escribimos un relato que debe ser específico relacionado a tal o cual tema, con una extensión determinada de palabras. Y ojo, que si te llegas a pasar o superás ese límite, todo el trabajo es desaprobado.
¿Acaso algo así no les parece simplemente estúpido? ¿No sería más conveniente dejar fluir la creatividad de los alumnos, en vez de reprimirla a solo un tipo de pensamiento?
Propongo ser escuchado, que la mente de los profesores y del sistema estudiantil sean más abiertos y que dejen actuar nuestra creatividad. Como otra solución, más posible aún, planteo que se incluyan nuevas clases de arte en todos los niveles, incluyendo secundario y primario. Es decir, música, teatro, cine, para que así los estudiantes tengamos un espacio extra- curricular en donde desarrollar nuestra creatividad y forma de elaborar pensamientos. Y, sobre todo, que podamos pensar fuera de la caja.