Surcorea emprende la diplomacia de los Juegos Olímpicos con Norcorea
Seúl aceptó una inusual oferta de Pyongyang para participar en la competencia que se hará en febrero.
Corea del Sur tomó ayer el guante de la inusual propuesta formulada hace horas por sus primos de la dictadura norcoreana para participar en los próximos Juegos Olímpicos de Invierno. La consiguiente invitación al diálogo fue elevada por Seúl después de que el líder norcoreano, Kim Jongun, en un mensaje al país, se mostró seguro del potencial nuclear y misilístico de su régimen, planteó que era hora de pacificar la Península y se mostró amigable por primera vez con sus vecinos del sur.
El ministro de Unificación surcoreano, Cho Myong-gyon, sugirió la realización de una reunión en la localidad fronteriza de Panmunjom el 9 de enero para discutir la participación de Corea del Norte en estos juegos que se realizarán en febrero en la localidad surcoreana de Pyengchang.
El ministro espera que los dos países se muestren también abiertos a mejorar sus relaciones bilaterales, dijo Cho, en medio del enfrentamientos por el programa nuclear y misilístico norcoreano que escaló en los últimos meses.
De tener lugar, se trataría del primer encuentro entre los dos Gobiernos en más de dos años, según una portavoz del Ministerio. Seúl quiere que la reunión sea a nivel de ministros o viceministros.
El presidente socialdemócrata Moon Jae-in llegó al poder en Seúl en
mayo de 2017 con la propuesta de armar puentes de diálogo con sus primos del norte, pero Pyongyang lo rechazó en todo momento debido a los ejercicios militares que Corea del Sur realiza con Estados Unidos.
La propuesta del norcoreano Kim combinó la oferta de diálogo a su vecino del sur con la reiteración del planteo de cesar esos ejercicios que Pyongyang considera una amenaza directa a su país. Kim Jong-un sostu- vo que en su escritorio siempre está el botón nuclear, pero que no era una amenaza sino una constatación del poderío destructivo alcanzado por el país comunista. Para Moon Jae-in, una mejora de las relaciones coreanas no puede separarse de la solución de la disputa nuclear. Y pidió al Ministerio de Exteriores que coordine con sus aliados y con la comunidad internacional la forma de compaginar una mejora de las relaciones entre los dos países y la solución de la disputa nuclear.
Donald Trump se subió rápidamente a este escaparate sosteniendo que todo está sucediendo debido a las sanciones que su país instrumentó contra Corea del Norte, una teoría discutida por los analistas.
El Comité Olímpico Internacional, por su parte, se mostró ayer abierto a esta novedad y afirmó que le gustaría continuar las conversaciones para “permitir la participación” de Corea del Norte en los juegos y que tomará una decisión final en el momento apropiado.
El trasfondo es que Corea del Sur está reforzando su sistema de protección antimisiles ante la amenaza nuclear norcoreana y organiza regularmente maniobras militares conjuntas con Estados Unidos. Los dos países exigen a Corea del Norte la reducción de su programa nuclear.
Comentaristas del diario conservador surcoreano Chosun Ilbo advirtieron de que Pyongyang podría tratar de separar a Corea del Sur y Estados Unidos con un acercamiento a Seúl. Los partidos conservadores de la oposición surcoreana pidieron precaución al presidente.
China, histórico aliado de Seúl, expresó su apoyo a la disposición al diálogo manifestada por las dos Coreas. “Hemos recibido el mensaje positivo lanzado por los líderes de las dos Coreas sobre la mejora de sus relaciones y la participación (de Norcorea) en los Juegos Olímpicos de invierno en Pyeongchang”, dijo Geng Shuang, vocero de la cancillería china.
“Esto es algo bueno. China celebra y apoya que Corea del Norte y del Sur aprovechen esta oportunidad para realizar esfuerzos por mejorar sus relaciones y fomentar la distensión de la situación en la península y la des- nuclearización de la Península”.
La situación en la región escaló en los últimos meses tras los últimos lanzamientos de misiles y otro ensayo nuclear en septiembre pasado. Moon había propuesto a Corea del Norte el pasado julio conversaciones militares sobre vías para rebajar la tensión y un encuentro de las asociaciones de la Cruz Roja sobre cuestiones humanitarias pero entonces fue cuando Pyongyang no accedió. ■