Cuando los números indican mucho más que apenas cifras

Todavía no se ha publicado el dato exacto, pero se sabe que Argentina cerró 2017 con un déficit comercial récord que ascendería a 7.600 millones de dólares. El grueso de ese equilibrio tiene dos “culpables”: primero Brasil y segundo China. Más atrás vienen Estados Unidos y Alemania. Des- de principios del milenio no se registraban cifras negativas tan elevadas en el comercio exterior del país. La balanza del intercambio de bienes del país tuvo recién en 2015 el primer bajón; se recuperó ligeramente en 2016 y el último año trepó a niveles que no se registraron antes. “Es el déficit nominal más elevado en 100 años de historia”, reconoció el economista Marcelo Elizondo.

Ni siquiera en 1999, cuando Brasil devaluó el real y Argentina mantuvo el 1 a 1 con el dólar, se produjo ese abismo entre lo que el país compraba en el exterior y lo que vendía. Peor aún, se afirma que este año el déficit con los brasileños llegará a superar el desbalance total del país con el resto del mundo.

Según Elizondo, “si se analiza la relación de Argentina con todos los países del mundo, se observa que este déficit es consecuencia especialmente de algunos (pocos pero muy significativos) resultados negativos en la balanza bilateral con algunos países en particular”. De acuerdo con sus cálculos, nuestro país padece “un déficit de más de 1.000 millones de dólares con seis naciones y de más de 500 millones de dólares con siete”. El experto señaló, además, que hasta noviembre último el desequilibrio con Brasil representaba más de la mitad del total negativo. Computado diciembre, podría ser todavía más alto.

“Con la economía nacional que se recupera hay una mayor demanda de importaciones, que volverán a crecer en 2018”, indicó el economista. Juzgó que el tema no podrá estar “ausente de la agenda del sector público, del sector privado exportador, y de los terceros proveedores de servicios a los exportadores para evitar una situación que podría perdurar en el tiempo y generar más estrechez en la relación económica con el resto del mundo”.

No es que los funcionarios argentinos estén paralizados. Hay una búsqueda por aumentar las exportaciones hacia Brasil mediante la eliminación de trabas que impone el socio. En la última cumbre del Mercosur se lograron eliminar la mayor parte de las 80 barreras que se habían identificado en el trabajo bilateral con los brasileños y en el multilateral, con el resto del bloque. Pero falta ver si esas acciones resultan suficientes. ■

Hay una búsqueda de mayores exportaciones desde la Argentina al socio del Mercosur.