Los gigantes de la tecnología se unen para mantener la “neutralidad en Internet”
Facebook, Microsoft, Google y Amazon van a la Justicia para que los proveedores traten igual a todo el tráfico online.
La organización Internet Association, que integran algunas de las firmas tecnológicas más poderosas del mundo, difundió que se sumará al desafío legal para pelear contra la programada revocación de la “neutralidad de la red”, que requiere que los proveedores de servicios de Internet traten a todo el tráfico online por igual.
El grupo que incluye a Google, Facebook, Amazon y Microsoft, entre otros, anunció que apoyaría los esfuerzos legales para bloquear la revocación aprobada el mes pasado por la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) de Estados Unidos, que está bajo el control del gobierno de Do- nald Trump.
La asociación no dio detalles, pero sugirió que buscará intervenir en las demandas previstas por varios fiscales generales. El presidente de la entidad, Michael Beckerman, dijo que la medida de la FCC, que se votó el 14 de diciembre, “desafía la voluntad de una mayoría bipartidista de estadounidenses y no preserva una Internet libre y abierta”.
Añadió que la asociación “tiene la intención de actuar como un interventor en la acción judicial contra esta orden y, junto con las compañías miembros”, continuará el “impulso para restaurar fuertes y exigibles protecciones de neutralidad de la red a través de una solución legislativa”.
El presidente de la FCC, Ajit Pai, ha argumentado que la regla de neutralidad promulgada en 2015 sofocó la inversión y la innovación en un sector en rápida evolución.
Pero quienes respaldan la neutralidad han argumentado que se necesi- tan reglas claras para evitar que los proveedores de servicios bloqueen o ralenticen sitios web por razones competitivas, y que la revocación aumentaría el poder de unos pocos proveedores dominantes para controlar lo que los usuarios ven online.
Expertos apuntaron que el fin de la neutralidad en la red podría atentar contra la diversidad de contenidos, contra la cultura de la innovación, dar lugar a actos de censura y hasta generar aumentos de precios.
Desde el punto de vista estrictamente legal, la modificación en las normas en Estados Unidos solo afectan directamente a los proveedores de acceso a Internet de ese país. Pero por ser Estados Unidos un actor central de la red mundial, lo que suceda allí puede repercutir en el mundo. Hasta podrían verse afectados los precios, porque los proveedores de ese país en las redes a los proveedores de otros países, entre ellos a los argentinos. ■